PUERTO REAL

El Río mira con recelo los posibles usos del suelo de Delphi

  • Apuestan por industrias limpias y no por "actividades contaminantes que perjudiquen la salud"

Naves de la antigua Delphi, en el Polígono El Trocadero

Naves de la antigua Delphi, en el Polígono El Trocadero / Julio González (Puerto Real)

El proceso iniciado por la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz para adscribir los terrenos de la antigua Delphi – en el Polígono El Trocadero - a la zona de servicio del muelle de la Cabezuela ha generado mucha preocupación en la barriada Río San Pedro, que se sitúa entre la antigua fábrica y la Cabezuela. Temen que esta zona se convierta “en otro punto para la manipulación de graneles y nuestra salud se vea aún más perjudicada”.

Las reivindicaciones de estos, a través de la Plataforma Vecinal Río San Pedro, no son nuevas. Llevan ya años demandando que las descargas en el bajo de la Cabezuela se hagan bajo techo. Entienden que las pantallas de protección que la Autoridad Portuaria va a instalar como medida de corrección no eliminará el problema y temen tener que llegar a denuncias judiciales como han hecho colectivos vecinales en Alicante, donde se ha logrado forzar que las descargas sean bajo techo.

También muestran su preocupación por el transporte de carbón desde Los Barrios a la Cabezuela, que pasa cerca del barrio, y por el almacenamiento de combustibles líquidos, que consideran “peligroso y una continuidad en las prácticas de uso de combustibles fósiles contaminantes”.

“Hemos sufrido durante años la contaminación que generó Delphi y ahora podemos comprobar la recuperación de especies en el Caño de La Ministra, como las orquídeas silvestres. Nos encontrarán enfrente si se pretende dar usos a los terrenos de Delphi a procesos industriales contaminantes. Nuestro futuro, el de todo el municipio, debe pasar por industrias limpias y tecnológicas que generen trabajo de calidad”, dicen en la Plataforma Vecinal Río San Pedro.

El colectivo pide al Ayuntamiento que se les informe de los pasos que se van dando y que no mantengan a los vecinos al margen de proyectos de relevancia que les afectan de lleno, como ya ocurrió con las obras del Puente de la Constitución de 1812, “que no ha supuesto mejoras para el barrio”.En definitiva, los vecinos creen que en los cuarenta años de vida de la barriada “se han producido muchos cambios con muchos intereses económicos pero que nunca ha revertido en el barrio”.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios