"24 horas antes de leer el testimonio de nuestro presidente nos había dicho que lo último que haría era rebajarnos el sueldo y ahora nos desayunamos esto". El ánimo está por los suelos en el Parque de Bomberos de Cádiz capital y saben que "lo peor está aún por llegar" y saben que este verano costará más de la cuenta hacer los cuadrantes de las vacaciones. "Y dicen que nos van a recortar porque cobramos mucho", dice uno de los bomberos . "Yo me voy a llevar a casa (aún no ha cobrado la nómina de este mes) unos 1.500 euros contando con guardias, nocturnidades... ¿Es tanto?". "¿Y sabes lo peor de todo esto?", pregunta otro de ellos, "los bomberos nunca decimos no a nada y por encima de todo somos eso, bomberos". "Cuando se abre la barrera y salimos pitando a apagar un fuego dejamos atrás los problemas laborales, y si estoy de vacaciones y hago falta me vengo, y si estoy libre, lo mismo", comenta, finalizando en tono deprimido con un "y así nos lo pagan". Se ofrecen a respaldar sus testimonios con nombre y apellido (son valientes por naturales, como dicta el Cuerpo) cuando afirman que entienden que los ayuntamientos quieran dejar de pagar: "¿sabes cuánto paga un alcalde por cada bombero? Unos 60.000 euros", respondiéndose a sí mismo. "Yo cobro 35.000 al año. La diferencia se la llevan los de arriba que no saben lo que es un fuego ni en la barbacoa de su casa". Les sobran los camiones porque no hay gente para tanta máquina, "y ahora el conductor no sólo conduce sino que también si tiene que bajarse a ayudar, se baja". "Vamos a ver si un día hay que lamentar algo", afirma uno de ellos en voz baja, mientras un compañero enumera un esporádico listado de gastos en los que realmente se podrían ahorrar muchos euros: "¿Por qué no eliminan el departamento jurídico, por ejemplo?". Se sienten desinformados, a la vez que traicionados por su presidente, y más sabiendo que el verano se les avecina caliente sin nadie que les sustituya mientras estén de vacaciones, "pero bueno, a ver qué pasa".