El Ayuntamiento de Puerto Real celebró la sesión ordinaria del pleno municipal correspondiente al mes de enero, que apenas tuvo contenido. De hecho, la primera sesión del año solo duró poco más de media hora. Uno de los únicos puntos que se incluía en el orden del día era una propuesta para cambiar el régimen de retribuciones de la actual concejal de Sí se puede, Encarna Marín.

Se proponía al pleno que la edil pasara a tener dedicación exclusiva, a razón de catorce pagas que harán un total de 23.500 euros al año. Actualmente, la concejala de Sí Se Puede Puerto Real percibía unos 1.190 euros mensuales y se pretendía que "el desempeño de las funciones como representante público no perjudique la ya más precaria situación que sufría como empleada".

La sesión apenas duró media hora y solo se trataron dos puntos de relevancia política

La primera crítica partió del PSOE, que recordó que hace unos días se había celebrado un pleno extraordinario para el reconocimiento de deuda para pagar a proveedores, al que no asistieron la mayoría de ediles del equipo de Gobierno. "Felicitar al equipo de Gobierno porque hoy, para votar a favor de la subida de sueldo de una compañera, sí habéis venido todos. La semana pasada, para aprobar los pagos a proveedores, faltaron", dijo la portavoz socialista, Elena Amaya.

En la moción que se llevaba a pleno se recogía que la edil Encarna Marín asumía áreas de mucha "responsabilidad y de penosidad" como Asuntos Sociales. "No entendemos eso. Para nosotros penosidad es trabajar en una mina, alquitranando carreteras a cuarenta grados o limpiando mierda de una alcantarilla, pero no siendo concejala de un Ayuntamiento", finalizó la socialista, añadiendo que votarían en contra de la subida.

Tampoco respaldó la moción el grupo municipal andalucista, que recordó que el compromiso del bipartito era reducir el gasto del equipo de Gobierno y que, actualmente, "cuesta unos 28.000 euros más que en la anterior legislatura, cuando se tenían 12 concejales, y ahora solo hay nueve en el Gobierno local", afirmó el portavoz del PA, Jesús Plaza.

Antes de someter el punto a votación, el alcalde, Antonio Romero, apostilló: "Respetamos la decisión que cada uno tome, pese a los fácil que es hablar de esto con los salarios que cobran los representantes de los partidos que han tomado la palabra".

Finalmente, la moción fue rechazada con los votos en contra del Partido Andalucista y el PSOE, la abstención de Izquierda Unida y los únicos votos a favor del equipo de Gobierno (Sí se puede Puerto Real y Equo).

Por otro lado, se aprobó por unanimidad una moción presentada por el grupo municipal de Equo en la que se pedía al Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital la derogación del Real Decreto 897/2017 en relación al bono social eléctrico, aprobado en el mes de octubre.

Según explicó la edil María Merello, el bono social no tiene en cuenta la situación de todas las familias vulnerables, en especial las monoparentales con menores a cargo o personas en situación de soledad, ni otros métodos de calefacción en los hogares y energía para cocinar con combustibles que no sean la electricidad (gas, fuel o, pellets).

También mostraron su rechazo porque "recae en administraciones locales y autonómicas parte importante de la gestión del bono".