El consejero de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía, Felipe López, evitó ayer a toda costa caer en el error de dar una nueva fecha concreta para la puesta en funcionamiento del tren-tranvía de la Bahía de Cádiz y optó por mostrarse sumamente prudente respecto a estas obras iniciadas en septiembre de 2008. Eso sí, aclaró que los últimos trabajos continúan su marcha según lo previsto y que el proyecto, en su conjunto, está ya totalmente finiquitado en un 95 por ciento. Por delante, no obstante, quedan todavía "unos meses", el tiempo que tarden en terminarse las obras del apeadero de Río Arillo, de completarse todos los procesos de homologación con la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria y de llevarse a cabo las pruebas de pre-explotación.

Demasiadas cosas para aventurarse con una fecha para la puesta en marcha de este servicio que, inicialmente, cubrirá solo el trayecto entre Chiclana y La Isla para hacer trasbordo a trenes de Cercanías en en el entorno de Río Arillo. El último plazo que se había dado para esta primera fase -eso fue a principios de verano- era marzo de 2018. Ayer, no obstante, se evitó abiertamente confirmar esta fecha o dar otras probables para la puesta en servicio de este nuevo sistema de transporte metropolitano a tenor de los muchos temas pendientes de zanjar que todavía hay sobre la mesa y que no conciernen en exclusiva a la Junta de Andalucía, sino también al Ministerio de Fomento, Renfe, Adif, la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria... Y eso supone "una complejidad añadida".

Con todo, Felipe López, que visitó San Fernando para inaugurar precisamente el noveno Congreso sobre Innovación Ferroviaria que se celebra en esta ciudad, reiteró el compromiso del gobierno andaluz por solventar estas últimas etapas de las obras del tren-tranvía de la Bahía "a la mayor velocidad posible". Y recordó que "todavía hay margen" para la puesta en marcha del tren-tranvía según el calendario que marcan los fondos europeos. "Hasta mayo de 2019", apuntó.

También reconoció el "inconveniente sobrevenido" que ha supuesto que la primera empresa adjudicataria de las obras del apeadero de Río Arillo -los últimos trabajos del tranvía- entrara en concurso de acreedores, lo que lógicamente trastocó todos los planes y la agenda prevista. "Se ha optado por la solución más rápida, que era que la propia empresa aceptara la cesión del contrato a otra en lugar de tener que resolver y volver a lictar de nuevo. Pero aún así ha supuesto un retraso", explicó. La obra, no obstante, afronta ya la recta final de los trabajos.

Del proyecto del tren-tranvía de la Bahía, dijo antes de inaugurar el Congreso de Innovación Ferroviaria, que es "una apuesta innovadora, inteligente y valiente" que viene a ilustrar ese compromiso de la Junta de Andalucía por el transporte sostenible siguiendo las directrices que hace tiempo que marca la Unión Europea y que también se ha puesto en marcha en ciudades como Sevilla, Málaga y Granada. "Hemos invertido unos 2.600 millones de euros en el desarrollo de estos sistemas ferroviarios metropolitanos de carácter moderno y eficiente", afirmó el consejero, que reiteró el compromiso del gobierno andaluz para duplicar en 2020-21 el número de kilómetros operativos y superar los 57 millones de viajeros anuales.