Tres meses. Ese es el plazo que hay que esperar para que arranquen al fin las obras de afianzamiento de la ladera de Arcos que pone en serio peligro la continuidad de varios bloques de viviendas de la barriada de La Verbena.

Este plazo de tres meses fue anticipado el pasado sábado por el delegado del Gobierno central en Andalucía, Antonio Sanz. En la propia local arcense el también presidente provincial del PP dirigió el comité ejecutivo provincial de esta formación política y durante su intervención agradeció al Gobierno central esta actuación de emergencia anunciada el pasado sábado por el propio ministro de Fomento, Íñigo de la Serna.

En este aspecto, Antonio Sanz recalcó que esta iniciativa anunciada "viene a dar respuesta a una reivindicación histórica de los vecinos de La Verbena, los cuales están padeciendo una serie de movimientos de tierra que está perjudicando a sus inmuebles y que necesita de una respuesta inmediata".

Una respuesta que ha venido de la mano del Gobierno de Mariano Rajoy, que en próximos días tramitará por vía de urgencia una inversión de 1.500.000 euros para acometer estas obras de emergencia, cuyo comienzo se estima en menos de tres meses. Se trata, además, de la primera inversión tramitada por vía de urgencia en la actual legislatura, según reconoció el propio Sanz. Bajo su punto de vista este hecho demuestra "que tanto el Gobierno de España como el Partido Popular se encuentran absolutamente volcados para dotar de una solución inmediata a este grave problema".

Por ello, el presidente provincial del PP de Cádiz hizo hincapié en que "ha sido el Gobierno de España quien ha ofrecido una solución inmediata a un problema histórico y es necesario ahora que se impliquen las demás administraciones públicas". Al hilo de esta reflexión añadió que desde las filas del PP "reclamamos a la Junta de Andalucía, a la Diputación Provincial de Cádiz y al Ayuntamiento de Arcos que aporten otros 1.500.000 de euros y así acometer las reformas definitivas que pongan fin a esta situación en La Verbena".

Sanz acompañó la tarde del pasado jueves al ministro de Fomento durante su visita a esta barriada de Arcos. Allí pudo ver con sus propios ojos las terribles grietas que afectan a los edificios desde hace años y pudo escuchar también las quejas de los vecinos.