Antonio Núñez Castro, el joven de 18 años acusado del homicidio a puñaladas de su padre el pasado lunes en Sanlúcar, fue puesto ayer a disposición judicial después de dos días de arresto en los calabozos de la Policía Local de la localidad. El joven se acogió a su derecho a no declarar ante el titular del juzgado número 4, que decidió enviarlo a prisión provisional comunicada y sin fianza.

El detenido llegó pasadas las dos de la tarde a los juzgados sanluqueños a bordo de un coche de la Policía Nacional. Al comprobar que había periodistas esperándolo en la puerta, y que el vehículo debía detenerse para esperar que le abrieran la puerta del garaje del edificio, el joven se cubrió la cabeza con la capucha de la sudadera gris que llevaba e intentó esconder la cabeza entra las piernas, impidiendo así que pudiera vérsele el rostro.

Antonio Núñez Castro fue detenido el pasado martes después de que el lunes comunicara a la Policía que había encontrado el cadáver de su padre en su casa, en la calle Cruz del Monaguillo. El cuerpo, con más de una docena de puñaladas en pecho, espalda y manos, estaba tumbado boca abajo sobre un gran charco de sangre. Aunque se sospechó de él desde el inicio, hasta el martes por la tarde no fue detenido por los agentes.