El Gobierno local ha contestado a la asociación de defensa del patrimonio Aula Gerión negando cualquier ilegalidad municipal en las "demoliciones" de la Antigua Fábrica de la Luz y de la casa con bodega ubicada en la esquina de la calle Regina con Santa Ana.

Sobre el primer inmueble, arguye que consta de dos parcelas, de tal manera que para la situada junto a la plaza Banda Playa "se ha concedido una licencia de obras de rehabilitación conforme a las determinaciones y condiciones de la correspondiente ficha de catalogación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), destinando su uso a oficinas y locales"; en tanto que la radicada en la confluencia de las calles Banda Playa y Tartaneros "no cuenta con ningún nivel de protección al tratarse de una nave y un transformador eléctrico que no tienen interés patrimonial alguno", por lo que hay una "propuesta" de construcción de un edificio de nueve viviendas y establecimientos comerciales, "usos compatibles con la ordenanza que le asigna el PGOU a esa parcela". En cuanto a la casa con bodega, "los trabajos consisten en una reestructuración de la vivienda unifamiliar que se encuentra protegida parcialmente por el PGOU para el mismo uso y para dos locales en planta baja".

El actual Gobierno, según su portavoz, Víctor Mora (PSOE), "está trabajando de forma coordinada con la Delegación Provincial de Cultura para reconducir las actuaciones que están enclavadas dentro del conjunto histórico, tarea nada fácil si se tiene en cuenta que muchas de ellas contaban con las correspondientes licencias e incluso ya se encontraban ejecutadas" en el anterior mandato corporativo de la coalición PP-Alternativa Sanluqueña (AS). Asevera que su objetivo es "evitar intervenciones que degraden el patrimonio histórico de Sanlúcar".

Por otro lado, en respuesta a la última denuncia pública del Partido Andalucista, Mora ha manifestado que el secretario local del PA, Antonio Prats, "sabe muy bien que la prórroga del canon de mejora -incluida en los presupuestos del Ayuntamiento de 2008 aún pendientes de aprobación definitiva- no tiene por qué conllevar una subida del recibo del agua y la basura, pero prefiere engañar y meter miedo a los ciudadanos, porque es su forma demagógica y populista de hacer oposición".

A su juicio, el "temor" de Prats sobre "una próxima subida encubierta del recibo del agua, el alcantarillado, la depuración y los vertidos" constituye "el colmo de la desfachatez".

Acerca del Plan Director de Infraestructuras Hidráulicas, Mora ha asegurado que contiene inversiones "muy necesarias y demandadas por la población" en esa materia y en lo concerniente al adecentamiento de calles.