Francisca Rodríguez ha dimitido como presidenta de la Entidad Urbanística de Conservación (EUC) de Costa Ballena días después de que haya trascendido que la Fiscalía de Mérida pide para ella una pena de ocho años y medio de prisión como presunta autora de un delito de negociaciones y actividades prohibidas a los funcionarios públicos, dos delitos de blanqueo de capitales y otro delito de infidelidad en la custodia de documentos.

Según difundió 'El Periódico de Costa Ballena', los hechos se remontan a septiembre de 2005, "cuando la presunta autora, siempre según el relato contenido en el escrito de acusación, valiéndose de su cargo como directora de Industria y Comercio del Ayuntamiento de Mérida, utilizó información privilegiada para favorecer a un empresario en la compra de unos terrenos, repartiéndose con él las ganancias obtenidas al 50%". De acuerdo con dicha información, hoy mismo se celebra el juicio en la Audiencia Provincial de Badajoz. La investigación judicial se inició en 2013.

El sevillano Francisco Alvarado, hasta ahora vicepresidente de la EUC, ha tomado el relevo de Rodríguez por decisión "unánime" del consejo rector. El nuevo presidente manifestó ayer a este medio que la dimisionaria justificó su renuncia al cargo que viene ejerciendo desde 2012 aduciendo "motivos personales". Alvarado, que no quiso entrar a valorar las razones concretas de la dimisión, destacó su "extraordinaria labor" como presidenta de la EUC "desde el punto de vista económico, de relaciones institucionales y con los vecinos". Anunció que su gestión será "continuista" hasta el final del presente mandato, previsto para diciembre.