La Policía ha desmantelado un laboratorio situado en la localidad madrileña de Fuenlabrada, encargado de elaborar y tratar cocaína que después era distribuida en la provincia de Cádiz, según ha informado la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil.

En la operación «Arcos», los agentes han intervenido tres kilos y medio de cocaína y han detenido a tres personas, dos españoles y un colombiano, que presuntamente se dedicaban a transportar y vender la droga.

En los registros practicados en las localidades gaditanas de Algeciras y Los Barrios, y en Fuenlabrada (Madrid), se ha intervenido un kilo de cocaína distribuido en paquetes y papelinas, fórmulas químicas para su elaboración y tratamiento, una prensa hidráulica para compactar la droga, moldes, planchas, balanzas de precisión y otros efectos.

Los agentes también se han incautado dinero en efectivo y cuatro vehículos.

Las investigaciones comenzaron hace tres meses al detectarse la existencia un grupo delictivo, asentado en el Campo de Gibraltar, dedicado a la distribución de droga entre consumidores y pequeños distribuidores.

Los agentes lograron identificar a su máximo responsable, proveedor y distribuidor de cocaína en la zona y que, al parecer, también se dedicaba a la introducción de alijos de hachís.

Otro de los detenidos se encargaba de vender la sustancia a los consumidores habituales en forma de papelinas.

El «camello» concertaba las operaciones por teléfono y cuando iba a realizar la venta de droga llevaba muy poca cantidad encima para, en caso de ser interceptado por los agentes, justificar su posesión para el autoconsumo.

Los dos detenidos en Cádiz mantenían numerosos contactos con varios ciudadanos de nacionalidad colombiana, quienes realizaban continuos viajes desde Fuenlabrada, con el objetivo de introducir grandes partidas de cocaína en la provincia de Cádiz.

Tras averiguar que se iba a realizar una nueva transacción, los agentes establecieron un dispositivo para localizar el vehículo en el que transportaban la droga.

Una vez interceptado el coche en la autopista Madrid-Sevilla-Cádiz, los agentes intervinieron dos kilos y medio de cocaína.

Parte de la droga se encontraba oculta en el coche y el resto la llevaba adosada al cuerpo su conductor, quien también ha sido detenido.