El Instituto Armado mantiene en pie un amplio dispositivo de búsqueda con profusión de medios materiales y humanos tras la pista de los cuatro hombres que la madrugada del pasado sábado dispararon contra un agente en Setenil de las Bodegas, después de eludir un control.

Fuentes cercanas a la investigación señalaron a este periódico que todo apunta a que se trata de la misma banda que perpetró el homicidio o asesinato de una joven puertorrealeña en El Marquesado, la misma que hirió a dos de sus familiares en otros dos asaltos y la autora de los disparos a un hombre en el núcleo rural de El Berrueco, en Medina Sidonia.

Como ya adelantó este periódico, el rastreo de los cuatro hombres se extendió ayer a la provincia de Málaga, ya que la Guardia Civil está segura de que huyeron en esa dirección después de descerrajar al menos un cartuchazo sobre el agente, tras saltarse el alto que le dieron. Del lugar de los hechos se alejaron en un turismo Volkswagen Polo de color negro, que luego abandonaron para proseguir a pie su fuga. En cualquier caso, es previsible que en su huida se hayan hecho con algún otro coche robado. Se trata de una banda muy peligrosa y violenta. Al menos uno de sus integrantes no duda en disparar sin contemplaciones con una escopeta de caza con munición de cartuchos cuando se ve descubierto. Suele actuar los fines de semana en poblaciones donde se celebran ferias o fiestas locales o en los núcleos rurales de sus términos municipales. En las últimas semanas han protagonizado varios asaltos a mano armada en la Sierra de Cádiz, según indicó un portavoz oficial de la Guardia Civil.