Un total de 90 alumnos de un instituto de Puerto Real, el Antonio Muro, fueron testigos ayer de un momento histórico. Más allá de ser los protagonistas de una nueva experiencia formativa desarrollada por Airbus, lo especial del momento se produjo porque el consorcio aeronáutico eligió para ello las instalaciones del Museo El Dique, en Navantia Puerto Real.

Para hablar de lo nuevo, del futuro, de lo que tal vez pueda estar en manos de la imaginación y el talento de algunos de esos jóvenes, se eligió uno de los enclaves con más tradición histórica y laboral, tal vez, de España. Allí, además, se reunieron por primera vez las cúpulas directivas de Airbus Puerto Real y del astillero puertorrealeño, con sus directores a la cabeza, Jesús López Medina y Pablo López Díez, respectivamente. Junto a ellos, uno de los referentes de este experimento, miembro del comité de dirección de la Fundación Corporativa creada por Airbus para actividades benéficas, el divulgador científico y director del Museo Príncipe Felipe de Valencia, Manuel Toharia. También estuvo presente la alcaldesa de Puerto Real, Maribel Peinado (PA).

Lo que ayer conocieron los 90 alumnos de tercer curso de ESO del instituto Antonio Muro fue el lanzamiento del programa Flying Challenge, en colaboración con United Way. El principal objetivo, como ayer se trasladó, es motivar a los estudiantes para que encuentren su vocación profesional y se evite así el fracaso escolar. La de Puerto Real es la cuarta planta de Airbus en implementar el proyecto, que anteriormente se lanzó en las planta de Airbus en Toulouse (Francia), Wichita, (EEUU) y Getafe (Madrid).

Flying Challenge es un proyecto que tiene su origen en "la inquietud por la situación económica actual, la elevada tasa de desempleo juvenil y la falta de motivación de los jóvenes en la incorporación al mercado laboral". La Fundación Corporativa de Airbus y United Way dirigen el programa con el objetivo de "ayudar al alumnado a identificar sus competencias personales y descubrir vocaciones, enfocando su proyecto de vida personal y profesional a través de la puesta en marcha de proyectos de emprendimiento social".

Los talleres que se impartirán a los jóvenes tratarán de inspirar, motivar y apoyar a los estudiantes en la adolescencia temprana para desarrollar sus competencias vocacionales y prevenir el fracaso escolar, y serán impartidos por voluntarios empleados de Airbus y expertos formadores de la Ashoka, "la mayor red internacional de emprendedores sociales innovadores", una organización "global, independiente y sin ánimo de lucro que lidera la apuesta por la innovación y el emprendimiento social y que tienen una amplia experiencia con adolescentes y familias implementando una metodología activa".

En definitiva, como expresó ayer Manuel Toharia, se trata de que los jóvenes vean que son el futuro. "Hemos visto hoy -en un vídeo de presentación emitido en el espacio museístico- aviones futuristas, asientos que se amoldarán a las características físicas de cada persona; todo eso está pensado, pero no está inventado, y tal vez sean estos chavales los que se encarguen de hacerlos realidad".

En la misma línea, el director de Airbus Puerto Real aseguró en su intervención que "lo fundamental es aprender y no todos pueden decir que tienen la oportunidad de tener en su lugar de nacimiento dos factorías como la de Airbus y la de Navantia". A los alumnos, que durante todo el curso escolar contarán con la ayuda de un grupo de voluntarios de la empresa aeronáutica en Puerto Real, les animó a "aprender de los demás, a escuchar, a preguntar, a divertirse; la clave del éxito es aprender de los demás y crecer", aseguró.

Tanto López Medina como el director de Navantia en Puerto Real alabaron el trabajo de estos voluntarios, pertenecientes a distintas áreas de la firma aeronáutica, que estarán junto a los alumnos para llevar a cabo su cometido. Además, el director del instituto puertorrealeño pidió a sus alumnos al final del acto que "aprovechen la oportunidad única que se les presenta".