Jueves Santo Horarios, itinerarios y recorridos del Jueves Santo y Madrugada en la Semana Santa de Cádiz 2024

Alarma por los pinchazos a mujeres

La gravedad no se puede medir por los daños físicos. Son agresiones intolerables contra la libertad que exigen una contundente respuesta

El SAS investiga en Andalucía, al menos, 16 casos de pinchazos a mujeres para determinar mediante análisis si, más allá de las heridas, se les hubiera administrado algún componente químico. Se quiere descartar o confirmar si nos hallamos ante otra fórmula para ayudar a doblegar la voluntad de las víctimas mediante el ya conocido método de la sumisión química. Las denuncias por este tipo de comportamientos crecen a diario y se extienden por todas las comunidades autónomas de España. Festivales, discotecas y espacios con aglomeraciones se antojan los apropiados para que los agresores consuman sus fechorías, hasta ahora con impunidad. Quizás, esa circunstancia alienta una especie de efecto llamada para los sujetos indeseables que también conviven en sociedad. No se trata de un fenómeno nacional. Los primeros antecedentes de estos comportamientos machistas proceden del Reino Unido y se propagaron más tarde por otros países de Europa. De momento, en España la situación resulta muy confusa. En las redes sociales se multiplican los testimonios de chicas que narran con detalle lo que supuestamente les ha pasado. Diversas instituciones, como el propio SAS, han preparado protocolos para afrontar este tipo de casos. También, los empresarios del ocio nocturno, que a su vez intentan evitar que cunda la alarma. En la mayoría de los episodios no se han constatado más delitos. Pero no hay que llevarse a engaño ni medir la gravedad de los hechos por los teóricos daños físicos. Independientemente de que las jeringuillas o los instrumentos que se usen inoculen o no sustancias, se trata de agresiones intolerables que cercenan la libertad de las mujeres. Se siembra el miedo y consiguen que modifiquen sus costumbres. Incluso que se planteen si pueden acudir con seguridad a determinados espectáculos o locales de diversión. Cualquiera de estos supuestos resulta inaceptable y exige de una respuesta contundente para erradicar esa plaga.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios