AHORA no opino, digo lo que sé. Los hechos. Que se superponen. O sea, Fran González, el cabeza de lista del PSOE en Cádiz y algún dirigente del PP de la provincia están por lo mismo. Por causas distintas y desenlaces diferentes: dejar que gobierne la lista más votada. Por el procedimiento de votarse a sí mismos, o abstenerse. En Cádiz para que no llegue Kichi a la Alcaldía, en San Fernando (el otro caso) para que Patricia Cavada no pase por las horcas andalucistas. Es la tentación y si la niegan, mienten. O tienen doble discurso.

De la verosimilitud de la primera bengala, la de Fran González, se ha hecho eco Pablo Iglesias, enviando un inquietante mensaje a los socialistas, con esa ironía amenazante tan suya, ese tono hiriente que suele emplear quien se siente ungido por el poder espiritual de la Nación. Frente a la Casta. Dirigiéndose a ellos, los dirigentes socialistas, con el familiar Pedro, Susana. Advirtiéndoles de los males que les afligirán si no echan a Teófila y abren las puertas de la ciudad de Cádiz a su candidato José María González, Kichi. Las plagas bíblicas. Curioso que Cádiz esté en el candelero por esta cosa que ha hecho plantarse al líder de Podemos. Es como decir: Cádiz es un emblema. Y no hay más que hablar. Cuando la verdad es que hay que hablar, y mucho. Por ejemplo el apoyo a un gobierno presidido por Bruno García. Para la lógica de los socialistas, se fuerza la dimisión de Teófila Martínez… Y de algunos otros. En el caso de San Fernando tiene mucho que ver con la profunda insatisfacción de los populares con Francisco José Romero, el candidato andalucista. Del que se dice tiene prácticamente cerrada la negociación con los socialistas, pero menos. Porque se está en casi todos los casos por la negociación "a la china", o sea, que todo parezca que está oquey pero no, cuando se está a punto de firmar la parte dice no, momento, hay este otro asunto. O, lo sentimos pero esto acordado no podemos asumirlo, hay que abrir de nuevo todo el abanico. Mientras el reloj tic tac y muchos con la ilusión puesta de que por fin hay acuerdo, asunto finito.

Es el último gong de lo que se mueve en estas dos ciudades pero que en casi todas se está a lo mismo. Madrid, digan lo que digan. Y Barcelona. Y muchas más. La fórmula Teófila se abre camino. Con alcaldes a remover tras perder la mayoría absoluta. Entre el susto y la muerte hay esta cosa de San Fernando y Cádiz, por poner dos ejemplos del embrollo.