En junio de hace tres años vino a Cádiz el Rey Felipe VI con ocasión de la celebración del 150 aniversario de este Diario de Cádiz y al finalizar su discurso le dio a Cádiz el mejor de los eslóganes publicitarios: "Cádiz es de primera". Escribí entonces que no lo dijo para consolar a los aficionados al fútbol, porque el equipo que lleva el nombre de la ciudad no hubiera logrado en aquella temporada el ascenso a Primera División, sino por su admiración a un periódico que llevaba 150 años en las manos de la misma familia, lo que supone una excepción y un logro en los medios de comunicación españoles.

Tres años después (el Rey vino a Cádiz en junio de 2017) Cádiz sigue siendo de primera y su equipo de fútbol está en la Primera División de la Liga de fútbol española. Yo creo que el monarca lo presagiaba, por lo que los sobresaltos de última hora, empatando y perdiendo en casa, no hicieron que se perdiera la fe en el ascenso. Hace mucho tiempo que no veo al Cádiz jugar en el Carranza. Los octogenarios como yo podemos seguir disfrutando de la vida, pero esos disfrutes lo limitan los años ya vividos. Por eso, ahora solo puedo acudir a los viejos recuerdos de otras épocas y, si acaso, pedirle información a mi nieto Pablo, que es un gran aficionado al Cádiz C.F. y también al Atlético de Madrid, continuando la saga familiar que sienten esos colores, sin que ni sus padres y abuelos tengan que hacerles propaganda.

Al Cádiz C.F.lo vi jugar en el campo de Mirandilla, contiguo a la plaza de toros, derribada hace muchos años. Allí, a fines de los años 40 con Julián Arana de presidente de la directiva, mi padre entró en la junta del club y veíamos casi todos los partidos, con la compañía de dos ilustres gaditanos como eran Alvaro Aramburu y Fernando Yraola. Eran los tiempos de Camilo Liz, Iván, Manolo Bueno y Paquirri, famoso por sus goles de cabeza, ayudándose con el puño. Pero mis mejores recuerdos son de los años 80, cuando el Cádiz C.F., ganó jugando en casa, consecutivamente a la Real Sociedad, Barcelona C.F. y Real Madrid ¡Casi nada! Para la próxima temporada le deseo lo mejor y confío que los aficionados al fútbol de la provincia se sientan identificados con el único equipo de la provincia que milita en Primera División. Así que jerezanos, portuenses, cañaíllas, chiclaneros, medinatos, roteños, del Campo de Gibraltar y resto de la provincia acudan al Carranza porque se necesita el apoyo de todos los comprovincianos.