Viernes Santo Horarios, itinerarios y recorridos del Viernes Santo en la Semana Santa de Cádiz 2024

Crónicas levantiscas

Juan Manuel Marqués Perales

800.000 empleos es una cifra maldita

Miguel Boyer reconoció el error de cálculo de los 800.000 empleos que él adjudicaba, de modo malicioso, a Almunia

Era otra España, cuando Felipe González prometió 800.000 nuevos empleos en la campaña electoral de 1982, todos entendimos que sería el Gobierno el que crearía esos puestos de trabajo. Escuché una vez a Miguel Boyer, el primero de los ministros de Economía de Felipe González, que haber incluido aquello en el programa electoral fue un gran error de cálculo que él, maliciosamente, atribuía a Joaquín Almunia, ministro de Trabajo en aquel Gobierno socialista. Lo cierto es que, con el tiempo, la base activa de la población española creció y, con ello, el número de empleados, pero antes hubo que pasar por la crisis de la reconversión industrial y naval. En definitiva, un desastre de promesa, similar a la de Zapatero con el Plan E.

Mariano Rajoy estuvo muy cerca de conseguir su objetivo de ampliar la base de trabajadores en dos millones de personas más, a medio millón por año. Llevaba un buen ritmo, pero le hicieron la moción de censura y, tras ésta, cayó la pandemia sobre todo el planeta. Pero sí, hasta entonces, se iba a medio millón de nuevos empleados. Juanma Moreno trató de adecuar la promesa mariana, y prometió en campaña la creación de 600.000 nuevos empleos en Andalucía en esta legislatura. No será así; incluso, sin pandemia, la cifra era tan aventurada como la bajada masiva de impuestos. Se puede reducir un poco la carga fiscal, pero la curva de Laffer no es un muelle de extensión infinita.

Pedro Sánchez ha presentado un nuevo plan, éste con la palabra resiliencia en su interior, con el que encaja los 72.000 millones de euros de transferencias de la Unión Europea en España, y el resultado es la creación de 800.000 puestos de trabajo a lo largo de los próximo tres años. ¿Por qué esa mención a ese primer Gobierno socialista si fue tan errónea? Felipe González pretendía conseguirlo sin bombona de oxígeno. España aún no estaba en la entonces Comunidad Económica Europea y, aunque su programa pasaba por un aumento de las inversiones públicas, primero tenía que desmontar un sector industrial obsoleto. Puede ser, Sánchez podría recuperar algo más que el empleo perdido a causa de la pandemia y acercarse a los 20 millones de cotizantes.

Pero España asume un tremendo riesgo, la deuda pública que nos va a quedar nos expone como una casita de papel a la subida de tipos de interés. Fue eso lo que le ocurrió a Zapatero con el Plan E, aparte de su dudosa utilidad, claro. Como los fondos europeos parece que se retrasan, el Gobierno español adelantará para 2021 un total de 27.000 millones en el Presupuesto. Ésta es la sustancia. O el talón.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios