F. Abril Martorell vicepresidente del Gobierno con Suárez decía que el problema vasco llevaba ya más de cien años y que quizás no tuviera solución. Eso parece entender algunos como el lendakari actual Ibarratche, erre que erre proponiendo su drástica consulta sobre la independencia y que al parecer va a debatir hoy jueves en el Consejo extraordinario de su Gobierno. Cuando las cosas no tienen solución, lo mejor es acostumbrarse. En términos médicos cuando una persona tiene por ejemplo diabetes y el médico le dice que es por vida, lo mejor que hace la persona es mentalizarse y ni siquiera considerarse enferma, como quien es una mijita cojo y no pasa nada, llega a sentirse completamente normal y con excelentes expectativas ante la vida. Yo he visto esta actitud y mentalización hasta en enfermos de cáncer.

Pero el problema vasco debe tener solución aunque sea parcial. Aunque hoy vayan a aprobar una propuesta, eludiendo la condena a Eta, sencillamente para buscar el voto de la izquierda abertzale y así lograr los votos necesarios. Un nuevo chiquilicuatre. Me hace tilín el comentario de Rodríguez Ibarra ante la reciente detención de los tres etarras en Francia "lo mismo que otras veces trágicas hay que guardar un minuto de silencio, ahora hay que guardar un minuto de alegría". Tienen razón todos alegres hasta los peneuvistas y no como el tétrico de Arzalluz considerándolo un show policiaco del Gobierno o el ínclito de Marinaleda solidarizándose con "los compañeros detenidos". Ya se sabe que elementos como los dos citados, antes se hacen toreros o gladiadores romanos que personas con juicio y Rh normal.

Esto de la independencia del país vasco no me entra en la cabeza ni con álgebra y trigonometría o escrito en arameo o caldeo. Cuando vienen por aquí los vascos, que vienen muchísimos, y se les dice... o se ríen o se extasían explicando lo bien que lo pasan por estas tierras y sobre todo disfrutando de la libertad que allí algunos no tienen. Quizás tengan razón los que opinan que los más culpables son los del PNV, poniendo el listón tan alto para un entendimiento que se haga imposible el acuerdo. Quizás también porque ¿a donde iban a ir y qué iban a hacer ellos en política, si todo estuviera normalizado?