La imagen que ilustra esta información fue tomada desde el paso elevado que hay en la curva de Torregorda a finales del pasado mayo, pero fácilmente puede ser un calco de lo que va a suceder en esta misma carretera, la autovía Cádiz-San Fernando (CA-33), a partir de mañana. Y es que el Gobierno retomará esta noche las obras de reparación del pontón sobre el río Arillo, unos trabajos que obligarán a cortar el tráfico durante más de un mes en dos de los cuatro carriles de esta carretera, una de las que más intensidad de tráfico tienen de toda la provincia. La primera fase de estas obras dejó en primavera retenciones de hasta seis kilómetros de longitud.