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Tiempo de libros

Molde roto. Una conversación con flamencos, es uno de los mejores libros sobre Flamenco que he leído nunca

Ya pasó. Hemos votado, compongan con lo que les hemos dado. Hagan bien su trabajo. La vida tiene que seguir. Más en este tiempo de libros. Digo que mi hijo Enrique me ha regalado Guía de pasos perdidos, de Javier Vela, y tengo que darle noticias de su lectura. Se lo merece, claro. Joaquín López Bustamante me dio La puerta entorná, que me encantó porque me gusta muchísimo la poesía flamenca y esta suya es de muchos quilates. Releo a trechos Oloron, la novela de toda la vida de mi amigo Amaya Zulueta, que es el reencuentro con la verdadera literatura, la que ni transige ni cede a modas, la absolutamente insobornable. Me llegó después de, para mí, uno de los sucesos más importantes de la Literatura gaditana, la novela de Ramón Pérez Montero Eras la noche, con su eco del inolvidable Luis Berenguer y la perfección narrativa. Estas lecturas las alterno con La dignidad e igualdad de las lenguas, de Juan Carlos Moreno Cabrera, que me llegó de regalo por mi cumpleaños desde Irún, de mi generosa amiga Elena Etxegoyen. Manuel J. Ramos Ortega me da su última novela, Sonata para un violín solo, editada por ELENVÉS. Curioso este gran intelectual gaditano, tan fértil y buen escritor. Su novela, completamente cinematográfica, discurre en Cádiz y rodea la historia de un violín olvidado y los judíos que intentan huir de la extrema maldad de los nazis en la ciudad trimilenaria. Su narrativa es de mucha efectividad y soltura. Como se suele decir, la novela quedará, por gaditana y por buena. Es un poco como Te doy la palabra, de Francisco Melero Mora, un estuche que contiene cinco libros en el que se explican las palabras, un conjunto de palabras de nuestro acervo más cercano y familiar. Se trata de una obra generosa del latinista de San Fernando y su aprecio por lo popular y sorprendente que tienen las palabras, algunas palabras. Vida de Jesús en iconos de la Biblia de Tbilisi, del P. Gabriele Bragantini, es otro de los libros que miro y remiro, leo y releo. Bellísimas ilustraciones y textos elevados. San Fernando 1936 Sepulcros blanqueados, de Miguel Ángel López Moreno, continuación de sus investigaciones sobre los crímenes que se cometieron en la ciudad sede la capitanía general del Departamento de Cádiz durante la guerra. civil. Pongo el punto y seguido en Molde roto Una conversación con flamencos, de Arcadi Espada y Antonio España. Tendré el honor de presentarlo en la Feria del Libro de San Fernando, que celebra 30 años sin Camarón. Créanme, uno de los mejores libros sobre Flamenco que he leído nunca. Los libros, de verdad, son una riqueza.

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