Gastronomía José Carlos Capel: “Lo que nos une a los españoles es la tortilla de patatas y El Corte Inglés”

Como los grandes tenores, como los grandes divos, Antonio Martín pidió que lo dejaran sólo en El Liceo y cantó a pulmón un pasodoble, como los grandes. Luego besó el suelo de uno de los teatros más famosos del mundo que tembló, como sólo tiemblan los tocinos de cielo buenos en su caminar cucharístico entre el plato y la boca. El Carnaval de Cádiz ha tenido un orgasmo y ese no nos lo quita nadie, aunque estemos en Cuaresma. Ha sido en Barcelona, un domingo por la tarde, a ritmo de tres por cuatro, con bombo, con octavilla, con un cógelo ahí y con dos mil personas delante. Nos lo pedía el cuerpo después de tantos años reprimidos en los que la fiesta había sido recortada con todo tipo de excusas…tanto twitter, tanto twitter.

La actuación de dos chirigotas y dos comparsas en el Liceo de Barcelona nos tiene que enorgullecer a todos. Gracias al empeño de una asociación de inmigrantes el tres por cuatro hizo que El Liceo se pusiera en pie como tan sólo ocurre con un aria de Plácido Domingo, que es lo mismo que un pasodoble de Martínez Ares, pero sin octavillas, ni punteao. No cabe duda de que esta actuación y su éxito es histórica como muy bien dice hoy Vera Luque. Supone poner al Carnaval al lado de otras artes y reconoce su valor artístico…ya sólo nos queda el Nobel.

Ahora nos queda tomar nota y lo que se ha reconocido por otros sitios nos lo tenemos que creer nosotros. Es fundamental poner en marcha el Museo del Carnaval a corto plazo y que se contemplen actuaciones carnavalescas en la ciudad. Creo que no sería una idea descabellada incluso que una agrupación carnavalesca recorriera los sábados por la mañana el casco antiguo de la ciudad en una iniciativa que creo incluso que podrían respaldar comerciantes y hosteleros y que podría atraer público. El Carnaval es uno de los rasgos principales de la marca "Cádiz" y tenemos que aprovecharlo, mostrarlo, presumir de él y provocar que se convierta en un activo, incluso más allá de la fiesta.

Me han contado que el tenor Plácido Domingo ya ha sido informado de la situación y que ha dicho que tomará medidas. De hecho se comenta que su próxima actuación no la cerrará con Puccini sino que cantará para terminar su concierto dos cuplés del Carapalo acompañándose con los nudillos puestos en el piano. Será apoteósico cuando en vez de una orquesta filarmónica, Plácido Domingo diga ¡Jiu! y con un bombista y un caja en el escenario como única compañía y en alegro pizzicato diga… Hay quien dice que Cádi no tiene fiestas.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios