ME apenó ver en las redes sociales la portada de la revista Interviú con la foto de la gaditana Inmaculada Michinina. Antes, mi enhorabuena por romper con la hipocresía de muchos que abuchearon a la rubia desde el anonimato de una bulla carnavalera para luego depositar en las urnas un voto con las siglas de su partido. De esos, en Cádiz, a puñaos. Usted, Michinina, se plantó ante ella cantándole sus verdades Las suyas. Y ahí creó un mito gaditano que abandera un movimiento ciudadano con una ideología más o menos demagógica. Pero, ¿hacía falta defender a teta descubierta su dignidad como mujer? A lo mejor, me equivoco. A otros les puede recordar esa imagen del cuadro de Delacroix titulado La Libertad guiando al pueblo, en la que una mujer, también a teta descubierta, moviliza al pueblo contra los poderes establecidos. No sé, a lo mejor me equivoco.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios