Jueves Santo Horarios, itinerarios y recorridos del Jueves Santo y Madrugada en la Semana Santa de Cádiz 2024

El Alambique

alejandro / barragán

Imbécil en moto

HAY en El Puerto un imbécil de los que ganan concursos de imbéciles. Como dice el diccionario, de escasos de razón. No, no es un político (creo). Es un imbécil anónimo, embozado, de los que llega rápido a ninguna parte, siempre haciendo ruido, de los que siempre tiene prisa, de los que siempre empujan para sortear obstáculos, de los que no dicen gracias ni por favor. Como él habrá varios, o muchos si ampliamos la perspectiva, pero hoy hablo de él. El imbécil de la moto que se pasea casi todos los días por calles y avenidas a velocidad absurda, aquella que inventó Mel Brooks para ir más rápido que la luz. Ese alelado que se cree que todos admiramos su poderío y su virilidad, porque es hombre, cuando nos adelanta como un cohete.

Desconocemos su nómina e ignoramos si tiene currículum vitae o simplemente se conforma con un perfil en el cara-libro. No nos consta su filiación política, ni su equipo favorito, ni siquiera sabemos si es cristiano viejo o semítico. El imbécil oculta su rostro bajo su casco protector de colores planos, como su ideología, que usa, al mismo tiempo, para proteger su débil cerebro de imbécil. Porque el resto de su cuerpo lo deja a merced de una humilde y fina camiseta, que se le levanta y flamea con el viento, y unas bermudas cualquiera, por lo que se deduce que tiene la seguridad de no hacerse daño si se cae. Es de los que cree que desollarse no duele, sin pensar que, con su imbecilidad podría matar a alguien, o varios álguienes. Porque su osado espíritu, egoísta por supuesto, no le da para pensar en el significado de tragedia. Evidentemente no teme morir o matar. Hay quien prefiere amonestar a aquellos que no perjudican al prójimo, mientras a éste se le aplaude, por su estupidez manifiestamente moderna, guay, chachi, molona.

Y me quedo tan pancho porque es anónimo, porque va sin nombre por la vida, cual llanero solitario, porque sé que no va a leer este escupitajo. Y lo hago porque soy así de cobarde, que no se lo digo a la cara. No como él, que es un valiente.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios