Viernes Santo Horarios, itinerarios y recorridos del Viernes Santo en la Semana Santa de Cádiz 2024

Tinta china

Enrique Alcina

Feria del dolor y la redención

Cariño verdadero y crítica social. La pasión por Cádiz no está en venta, ni en la reventa, ni hay dinero para comprar el contraste que ofrecen los correligionarios del mar y de las sagradas vocaciones gaditas y los exponentes de la irreverencia y la denuncia irónica o contundente. Trae letras la actualidad sociolaboral, igual que la linda música de la santísima creatividad local. Lo mismo da un paso adelante el romance de la tradición oral que quiebran esquemas los rebeldes imperfectos y se escribe un himno bañado por la marea que cambian la letra a la mentira nacional.

Dios coge confesá a Cádiz, penitente y ocurrente. Catedrales como coros y comparsas. Los hermanos mayores Pardo y Rivero colman de fervor a sus fieles. Hay quien clama por la vuelta de Goliat y de otros personajes mitológicos. Los acólitos, la congregación en general, hace suyas las plegarias del coro, que pone el dedo en la llaga del amor incondicional a Cádiz y al Cádiz. Ya no se lleva el morao, el color del Pendón giró a amarillo y azul. Los gaditanos exportan la pasión submarina allá donde recalan. La pasión no depende del ipc ni del euríbor del tres por cuatro, la historia centenaria del club no pertenece a Muñoz, ni mucho menos a Baldasano, ni al Ayuntamiento, ni a la Diputación, cantan los frailes. "Son nuestros los ascensos y los descensos, sólo nuestros. No se vende ni se compra con dinero el amor verdadero". Éxtasis colectivo. Alabado sea el señor. Luego, Rouco se escandaliza con los cuplés, se está perdiendo tó. Carta de San Vicente Sánchez sobre el martirio de la castidad y carta de San Federico empálmate sobre los caminos del sexo. ¿Pecado mortal? "Federico está loco por ir al don Tico". En fin, venerable. De interés turístico.

Rivero, en cambio, enardece a la concurrencia con una oda a la mujer de cincuenta parriba a quien le venden la juventud eterna mientras le cierran las puertas del trabajo, porque "ningún empresario la quiere por ser vieja". A limpiar casapuertas. Prejubilan la dignidad. Pero hay gente que mantiene los valores, como el padre de la niña (comparsa) que espera que ella "no caiga en la trampa de la envidia y no se venda por dinero y fama". Peligro mediático, que se dice ahora. Metáfora confesional.

Entre perlas resuenan popurrís repletos de gerundios, lenguaje gestual, frases hechas, la pedantería y las paradojas. Hay quien reclama trabajo y a renglón seguido se vanagloria de la fama de flojera atlántica. Por otra parte, habría que preguntar a ciertos autores, en un concurso tan exigente, si tienen amigos y/o familiares. Y si leen algo que no sea el Marca. Con perdón. Y si tardan cuatro meses en rimar Falete con filete empanao y cosas así. Ejem.

Sin anestesia, y con "mucha poca vergüenza", los de Castellón de Cascana parodian a doña Teo, a la que nadie vota en Cádiz, por lo visto, y ponen en entredicho aquello de que "Cádiz prospera". "Y la juventud currando afuera". El segundo puente, de hecho, se levantará para aliviar el éxodo a la tierra prometida. Al tiempo, Doña Teo imparte órdenes. "¡Romaní! ¡Una maceta aquí!". Y los imprevisibles chirigoteros aluden a los 2.500 leuros por crío, quien tenga siete juntará para un Renault Clio, así como a las bulerías de Villarreal, las alegrías de Benicassim o los fandangos de Marina D'or. Mucho sarcasmo, melancolía del emigrante, qué pechá de congelaos. Y antes de alicatar el Puente Canal, uno de ellos se lía a jugar con la Wii, ya le llaman José Wii. Hay que ver lo preparaos que están los gaditanos. Las letras de los ácratas de Puerto Real parecen más pre-paradas, en especial el himno de Espagna.

Oh, España, "paraíso de sinvergüenzas, alcaldes y diputados de la calaña más selecta, donde el dinero negro reina, los sueldos son una mierda, las hipotecas estrangulan a la gente, se impone la justicia del dinero y cada vez baja más el nivel cultural". En síntesis, "la vergüenza nacional". Tiembla, Jiménez Losantos. Estos tíos no cantarán en la Cope, los de Cascana tampoco.

Los que están en contra de tó rememoran después los días de Delphi, la crónica de una muerte anunciada, y rindne tributo a Carmen y las mujeres que lucharon contra el fantasma del paro y apoyaron a sus maridos. "Aunque digan que no sirvió de ná, todo el mundo sabe que las mujeres más valientes viven en Puerto Real".

Ya puestos, los chirigoteros de Barbate no se muerden la lengua. Un pueblo aislado de la industria, condenado a la mar. "Mi pueblo se solidarizó con Delphi, y nos sentimos apoyados en la tragedia. Pero hoy voy a pedir un poquito por mí, que Barbate se muere". Y proponen: "Nosotros ponemos los cojones y otros ponen los millones. No quiero limosnas". Duelo por los marineros.

Los ferroviarios de Jerez, por su lado, enfatizan que la provincia "lava sus vergüenzas con mascaradas". "La feria de nuestro dolor". Una farsa, Delphi de nuevo, la emigración y Chaves, y los demás, "poniendo el culo al traidor por treinta monedas".

No hay tiempo de exprimir letras como la censura a la revista El Jueves, algunos cuplés sosos no llegan y otros salerosos se pasan de largo. Sin medida. Aquí ya se canta incluso al reparto de bienes de Marichalá, fíjate tú lo adelantaos que estamos.

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