Luis Pastor reflexionaba el domingo en las tablas del Falla sobre la ausencia de referentes en la izquierda. Para introducir su disertación poética de 'Qué fue de los cantautores' habló de la frustración sufrida por su generación y cómo la caída del muro supuso el monopolio ideológico por el que sólo quedaba un prisma desde el que analizar el mundo, a través del dinero. Es cierto que la izquierda política está huérfana de modelos desde hace tiempo. Desde que Lula ennegreciera su aura con la corrupción y el petróleo, solo los rayos de luz dejados por José Mujica han iluminado un camino casi expedito. En Europa, la izquierda pasa por aferrarse a lo que la crisis ha dejado en pie del Estado del Bienestar. Y a pesar de la falta de modelos donde elegir, en España se fractura en diferentes partidos que encuentran tantas divergencias entre ellos que no consiguen ponerse de acuerdo para gobernar.