LA temporada otoño-invierno del Falla se ha adelantado al verano con el estreno de una obra de la compañía 'La hormigonera'. La plaza de Fragela está levantada para mayor gloria de los mirones de obras, que andaban preocupados ante las reiteradas paralizaciones o retrasos que se están produciendo en los últimos tiempos. No se descarta que formen una plataforma reivindicativa para que las obras sigan su curso y tengan con qué entretenerse y poder opinar sobre la adecuada manera de manejar la rotaflex o las dificultades que entraña el repellado con palaustre. La del Falla es ejemplo, rara avis, de obra que marcha a buen ritmo. Como la de la Casa de las Artes, que cada día me despierta con el ruido de sus máquinas. A ver si acaba a tiempo y pronto escucho violines del Conservatorio en lugar del machacante soniquete de las perforadoras. Que una obra de Verdi es siempre más agradable que una de Dragados.