Jueves Santo Horarios, itinerarios y recorridos del Jueves Santo y Madrugada en la Semana Santa de Cádiz 2024

Efemérides

La austeridad era la norma y ni siquiera nos dieron gaseosa de La Alianza, que por aquel entonces era un lujo

Una de las páginas más leídas de este Diario de Cádiz es, sin duda, la que destaca la noticia más interesante de hace respectivamente 150, 125, 100, 75, 50 y 25 años. Pocos periódicos en España pueden permitirse el lujo de presumir de antigüedad y continuidad, porque al que se edita en Cádiz, solo le superan un par de otros periódicos nacionales, curiosamente ambos de provincias, como son Faro de Vigo y El Norte de Castilla. La selección de noticias la hace José María Otero Lacave, que perteneció hasta su retiro al Cuerpo Jurídico de la Marina de Guerra, alcanzando el grado de Coronel, como su gran amigo Federico Joly Palomino, prematuramente fallecido.

Esta misma semana, entre las noticias destacadas, aparecía una que se había publicado hace 75 años, concretamente en el mes de septiembre de 1944. Relataba una fiesta infantil en el Tenis de Cádiz, fundado en 1911 en los terrenos de los viveros del Parque Genovés. Refería la noticia el resultado de una carrera de sacos, en las que habían participado Adolfo Núñez, Juan Luis Ruiz Tagle, María Jesus Aranda y el que suscribe. Recuerdo perfectamente la ocasión que se detalla en la noticia: acababa de cumplir 9 años y el resultado de la carrera fue en el mismo orden que aparece en la noticia, o sea primero Adolfo Núñez Bensúsan, que ha fallecido y que lo recuerdo como el mejor deportista de mis amigos, porque destacaba en tenis, fútbol y hasta en esa modalidad de correr con medio cuerpo dentro de un saco; en segundo lugar quedé yo y tercero y cuarto fueron Juan Luis y María Jesús y no se me olvida, porque nada más terminar la carrera se me acercó Rafael Palomino Escobar, que usaba su aspecto impresionante y un tanto amenazador, aunque ha sido siempre un hombre bondadoso y de buen carácter, para invocando su parentesco con Juan Luis Ruiz Tagle (sus respectivos padres eran primos), me dijo que su pariente debía de ser el segundo y no el tercero, porque yo le había empujado para hacerlo caer. En lo que recuerdo, o no formuló su reclamación, o no le hicieron caso y el resultado se mantuvo, sin que hubiere polémica por los trofeos, porque en aquellos años, recién terminada la Guerra Civil y con otra mundial amenazante, la austeridad era la norma y ni siquiera nos dieron una gaseosa de La Alianza, que era por aquel entonces una bebida de lujo, ni menos un trofeo de recuerdo; solo agua que bebíamos directamente del grifo. Hoy a los ganadores les darían medallas, que recibirían solemnemente en el pódium y se harían fotos con sus padres.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios