Alguien paga en Cádiz? Esa frase lapidaria fue pronunciada por un compañero hace unas horas cuando en esta sección se empezó a recitar la lista de sucesos laborales por impago: las limpiadoras de los centros deportivos municipales, las de Diputación, ahora también las pertenecientes al Estado, los vigilantes del Falla y a todos ellos se le unen las reivindicaciones de la Policía Local y las informadoras turísticas, aunque en estos dos últimos casos no son por impago. En el restante de los casos se trata de servicios públicos contratados por las administraciones públicas tras sacar a concurso su prestación. Algo debe estar fallando cuando se está produciendo esta epidemia de empresas que no pueden llevar a cabo las tareas que tienen encomendadas. O se tiran por los suelos los precios por parte de las empresas, o el criterio económico es el único que prevalece. De esos polvos vienen estos lodos.