EL CIERVO es una revista que se publica desde hace 59 años en Barcelona y que, en todo momento, ha apostado por la democracia, el diálogo, y por un cristianismo en sintonía con el Concilio Vaticano II.

En el último número publicado (septiembre-octubre 2010) aparece un título sugerente: "Qué hay que saber al salir del colegio". Diversos educadores responden a la pregunta: Reproduzco aquí algunas de sus frases que, más que frases, son programas. Al final del colegio -y además de haber adquirido los conocimientos fundamentales de nuestra cultura, y las competencias básicas necesarias para hacer frente a la vida-, se "deben tener ya muy adquiridos el hábito de trabajo, y el sentido de responsabilidad, lo cual significa asumir los propios fracasos sin culpar de ellos permanentemente al sistema" (R.Moreno). "La educación espiritual resulta estratégica, ya que ayuda a construirse un mundo interior de valores y de asunción de normas, que permitirá al alumno integrar crítica y creativamente las influencias educativas que recibe" (P.Menéndez). "El sistema educativo debería segurar que cada alumno encuentre un instrumento (literatura, teatro, música, danza, pintura, artes visuales y plásticas) que le permita expresar con seguridad sus inquietudes emocionales, y así construir una personalidad íntegra con posibilidades de aportar algo al mundo y llegar a ser feliz" (P.Farrás). También necesitará "el conocimiento del control y la gestión de sus emociones desde bien pequeño. Saber expresarlas. Conseguir un autoconocimiento de sus potencialidades personales. Para llegar a ser personas, han de conocer su identidad, y las etapas de su propio desarrollo físico-corporal, psicológico, social y espiritual, necesarias para su crecimiento" (JM Fisa).

Estas aportaciones, y las otras muchas que encontrarán en la revista, nos recuerdan lo apasionante que es la misión del educador. Por ese motivo, al inicio de este nuevo curso, me ha parecido interesante el recogerlas aquí.