No cabe duda de que somos una ciudad en la que hay confianza. Cádiz es como un salón comedor...pero con 3000 años de antigüedad y claro la gente aquí no se trata ni de don, ni de usted, aquí nos gusta eso del "El Sandía", "El Poba", "El Almendrita" y esas cosas.

Cádiz quiere ser carnavalesco hasta en las papeletas para las elecciones a alcalde, como si aquello fuera más que una candidatura el libreto de "Voces Negras". Así los partidos políticos quieren que sus candidatos vayan con su mote puesto. El Kichi, el Frank, el Juancho.

Ya puestos para seguir con este estilo "informal" yo creo que lo suyo es también sustituir los colegios electorales por barras de bares y que el voto se deposite en una fuente de papas aliñás, en vez de una urna...que eso es más propio de El Santo Entierro. Sería lo suyo. Los presidentes de las mesas te invitarían a una cervecita cuando deposites el voto y si le pides un comprobante para el trabajo te lo escriben en una servilleta. Los partidos políticos más que apoderados en los colegios tendrían "abovedados" porque todos tendrían los estómagos en forma de cúpula catedralicia de la cantidad de Cruzcampos ingeridas durante la jornada.

Los resultados se podrían dar más que en porcentajes en "cuartos y octavos" que son algo mucho más gaditano y en vez de papel como de periódico para las papeletas se podría utilizar papel de estraza donado para la ocasión por el Freidor de Las Flores. Inventariamos otra cosa nueva, las elecciones patrocinadas, como si fueran los bombos de las chirigotas.

En los mítines, para que también sean más divertidos, cada partido podría exponer su programa como si fuera un romancero y con rima consonante: "No al calentamiento global que sufre el mundo entero. Cádiz, con tanto calor, tú no eres la tacita de plata, eres la tacita del puchero". De esta medida quedarían exentos los de Ciudadanos, que son muy sosos y los de Vox...que son más de fiestas típicas.

Esto si que sería de verdad la pamplina esa que dicen los políticos al empezar una mañana de elecciones: "Hoy es la fiesta de la Democracia". Esto si que sería una fiesta...lo malo es que aquí, con lo que nos gusta un vaso y una barra de bar, estaríamos todos los días de mociones de censura...para tener que celebrar elecciones todos los días del año.