Análisis

aNA SOFÍA PÉREZ- BUSTAMANTE

El violín Monasterio

Ando redactando unas memorias de familia y voy por un tatarabuelo cántabro fascinante. Jesús de Monasterio (1836-1903) fue un niño prodigio del violín al que llevaron con siete añitos a tocar ante Isabel II. Luego estudió en Bruselas y se estableció en Madrid, donde fue profesor y director del Real Conservatorio. Su pieza más conocida es el Adiós a la Alhambra (1855), que se inscribe en el nacionalismo postromántico y es pionera de la corriente denominada 'alhambrismo', que llega hasta García Lorca. Esta obra emocionó a Giacomo Meyerbeer y llegó a ser tan conocida que un jovencísimo Yehuda Menuhin la grabó en los años 20. Muy conocido también es su Concierto para Violín y Orquesta en Si Menor (1859; 2.ª versión de 1880), el único de estas características compuesto en España en el siglo XIX (Ara Malikian lo grabó en 2010). Era Jesús emotivo, melancólico, sumamente nervioso y persona profundamente buena. Fue muy amigo de Concepción Arenal, a la que ayudó cuando se quedó viuda y a la que introdujo en el mundo de la caridad y la filantropía. Ambos compusieron al alimón una nana para una sobrina de Jesús que murió prematuramente. El poema de Concha, Desconsuelo de una madre (1863), se publicó con la partitura titulada Salve a dos voces (Álbum de canto, 1872).

Famosa es la historia de cómo en 1852 fue Monasterio el primer intérprete del Ave María de Gounoud. Y novelesco su noviazgo con Casilda de Rávago, con quien se casó a la romántica, depositándola en casa de una persona de calidad, que era lo que se hacía cuando los padres de ella no daban el consentimiento.

Ahora ando buscando dos cosas: a la historiadora de la música Mónica García Velasco, que parece haberse evaporado (la habrá fagocitado su director de tesis, que parece de esos que dan conferencias leyendo power points ajenos). Y al propietario actual del stradivarius llamado Monasterio.

Misteriosa es la historia de este violín, cuyo último propietario conocido fue otro niño prodigio, Ruggiero Ricci (1918-2012). Si quieren ustedes escuchar cómo suena, es el cuarto corte del disco La Gloria de Cremona (1964), el Cantabile und waltzer de Paganini. Disponible en YouTube.

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