Asesor en el primer mandato, número dos en la práctica en el actual, Demetrio Quirós ha adquirido aún más poder con la reordenación que se ha producido en el equipo de Gobierno tras la salida de David Navarro. Quirós es como la mano que mece la cuna actualmente y pertenece al círculo de confianza del alcalde junto a algunos de los asesores.

No en vano fue una de las personas que estuvo más activo en los inicios de Podemos en Cádiz y cuando se construye la candidatura municipal que finalmente acaba destronando a Teófila Martínez después de 20 años de Alcaldía.

En el reparto que hizo Kichi el año pasado al iniciar el segundo mandato, Quirós llevaba una concejalía importante a nivel interno en el Ayuntamiento pero de las más peliagudas, como es Personal, y después otras de las que se pueden considerar de segunda fila, tales como Administración Electrónica, Redes, Comunicación y Transparencia y era el presidente de Cádiz 2000, la empresa municipal que absorbió a todos los trabajadores que han sido remunicipalizados en los servicios de playas. Sin embargo, la que pasaba desapercibida era la de Coordinación, con la que se convertía en el motor que tenía que hacer funcionar a todo el equipo de Gobierno.

Funcionario de la Administración estatal, Demetrio Quirós recibía sin embargo, la primera tenencia de Alcaldía, que ni más ni menos indica que ante la ausencia del alcalde, éste pasa a ser el primer regidor de la ciudad. Esa decisión del alcalde llamó la atención porque en la lista con la que se presentó Adelante Cádiz a las elecciones municipales iba en el número siete, lo que hacía ver que es mucho más importante el poder que el puesto de salida.

Ahora recibe otra de las patatas calientes que hay en el Ayuntamiento de Cádiz, la Delegación de Seguridad Ciudadana con el conflicto de la Policía Local en plena efervescencia.

Hay gente que sirve para estar delante de los focos. Quirós no es de esos. Él se siente cómodo en su trabajo detrás de la barrera pero imprescindible, en su mirada global y transversal. Ni siquiera en los plenos es de los que realiza más aspavientos pero éste es el triunfo del hombre del traje gris.

Ahora, sin embargo, con la Policía Local le ha tocado salir de la cueva y exponerse a la luz que quema, a la de un conflicto que se ha enquistado y que ya a Teófila le dio quebraderos de cabeza durante meses con las famosas pelucas de barbie Teo que la perseguían allá por donde iba.

Un súper concejal que sustituye a otro que lo fue durante el primer mandato con un acumulación de concejalías y cargos enorme. Tanto ruido generó David Navarro durante los primeros cuatro años de Kichi como el silencio de una salida que se venía vislumbrando desde hacía tiempo. La despedida oficial se realizó en el Pleno como un mero formalismo. Un punto en el orden del día leído por el secretario, dar cuenta de la dimisión y a otra cosa. Ni una mención ni un agradecimiento ni nada por el estilo del que ha sido su jefe durante cinco años por alguien que, bien o mal (ha habido de todo), ha trabajado por la ciudad.