El Puerto Accidente de tráfico: vuelca un camión que transportaba placas solares

Alfa y Omega del verano portuense, dos Patronas que velan por la ciudad, una morenita con olor a nardos y unos tirabuzones que pasean por Bajamar.

Nuestro tiempo estival, enmarcado por dos paréntesis marianos que causan el revuelo por las calles marineras y esclavas de nuestro Puerto.

Mañana, 16 de Julio, se abre el paréntesis con la primera de Ellas, con nuestra Virgen del Carmen, Patrona de los Marineros y Carmela de San Marcos.

A todos o a casi todos nos pasa, que al llegar estos días previos a la Festividad de El Carmen, tiramos de recuerdos antiguos. Recuerdos que nos pueden llegar desde el lado más íntimo familiar y devocional; desde el lado de las tradiciones de nuestra ciudad y desde el vértice donde las dos anteriores se mezclan y no se pueden entender la una sin la otra.

Una ciudad marinera como es la nuestra, raro es la persona que no tiene ningún vínculo con las aguas del Guadalete y de nuestra Bahía, por eso, hace que el día de mañana sea especial para todos.

Ya serán dos años los que nuestra Patrona Marinera no navegará por esas aguas de adoquines centenarios. Serán dos años ya, los que no verás tu río, aunque si es verdad que sus aguas las sigues bendiciendo en la tan simbólica misa de tarde de San Marcos.

Son muchas veces las que he pensado que fuiste Tú realmente, la que decidiste hacer de tu casa la Parroquia de San Marcos, volviéndote a quedar en ella tras tu última salida en 2019. Tú sabías que ibas a ser muy necesaria durante estos tiempos de pandemia y quisiste quedarte cerquita de tu barrio, cerca de tu río, cerca de las personas que tienen el salitre como vestimenta, las olas del mar como perfume y hacer de tu presencia y cercanía algo cotidiano entre nosotros.

Soy de los que piensan que todo pasa por algo y nada ocurre por casualidad; que Tú quieres estar donde estás, para escribir otro nuevo capítulo en la historia del Carmen Portuense, pero esta vez mas cerquita de tu gente marinera y siempre en la mente, aquellas Madres que te cuidaron siempre y a quien debes tanto, tus Hermanas Concepcionistas.

El Carmen, volverá a navegar.

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