Crónica de San Juan de Dios

Melchor Mateo

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Nadie le pone el cascabel al gato con el nuevo hospital

Ni antes ni ahora la Junta es capaz de hablar con sinceridad del proyecto del nuevo Puerta del Mar

Imagen del día en el que se firmó el convenio del hospital en enero de 2008.

Imagen del día en el que se firmó el convenio del hospital en enero de 2008. / Joaquín Hernández Kiki

Cádiz vive en el eterno deseo, en quitar hojas del calendario sin tachar las tareas pendientes. Nos cansamos de escuchar una vez tras otra a las distintas fuerzas políticas hablar y hablar de los proyectos que están en manos de los otros, pero cuando tiene la oportunidad de hacerlo, viene la hora de las excusas. Hay ejemplos para hacer una lista de agravios pero quizás, el más paradigmático es el del nuevo hospital Puerta del Mar.

En un mundo donde todo se trata de medir en términos de rentabilidad electoral y cuando ya nos han puesto los dientes largos, nadie le quiere poner el cascabel al gato de que el hospital va a quedar aparcado hasta los restos, es decir, que no se va a hacer. Ni antes lo hicieron los socialistas, ni ahora los populares.Mientras tanto, nos tienen entretenidos dando patadas adelante, sin matar definitivamente la ilusión, poniéndonos la zanahoria delante pero sin que podamos alcanzarla nunca.

Estamos de acuerdo en que la operación que se montó en el año 2008 ahora no tiene sentido porque el escenario ha cambiado de manera radical. Por supuesto que se ha modificado desde el punto de vista económico pero también en el sanitario.

En esta década se ha recuperado el hospital San Carlos que ha permitido descongestionar en parte el actual Puerta del Mar. Sin embargo, el proyecto iba mucho más allá de una ampliación, sino que significaba entrar en la modernidad hospitalaria y también venía acompañado de una vertiente de investigación importante.Y en lo que se refiere a la parte económica, hay plena coincidencia en que hay que modificar el convenio pero da la sensación de que todo el mundo está tapado para que cuanto menos se hable del asunto, mejor. La Junta de Andalucía por encima de todos, porque es el que tendría que tirar de la cartera para hacer el proyecto.

El Pepito Grillo del asunto y que de vez en cuando alza la voz es la Zona Franca, que es la que se ha dejado más de diez millones de euros en comprar un solar para un proyecto que está en el alambre, dinero que no podemos dejar de olvidar que es público.

La Junta de Andalucía, los de antes y los de ahora, no han parado de marear la perdiz. El problema es que mientras que no se haga el entierro del proyecto, Zona Franca está con las manos atadas porque el uso sanitario que tiene el suelo le impide acometer cualquier otro tipo de proyecto.

Ahora Fran González quiere tratar de llegar a un acuerdo por las buenas con la Junta ofreciendo hasta una permuta de terrenos para poder librarse de un proyecto que tiene secuestrada una inversión de millones.

El problema es que esta ciudad vive en el eterno sueño de los proyectos imposibles que parece que sí tienen una mayor facilidad en otras provincias, como es el caso del tercer hospital para Málaga o la ciudad sanitaria de Jaén. Lo frustrante en este asunto es que ni ahora ni nunca nadie ha hablado claro cuando las cosas se han puesto con el viento en contra. Y tememos que vamos a seguir así.

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