La posibilidad de que las dos primeras potencias mundiales, Estados Unidos y China, lleguen a un acuerdo total en el ámbito comercial antes de final de año parece que ha devuelto optimismo a los mercados de renta variable.

El Íbex 35 concluyó la semana con ganancias del 0,7%, si bien el descenso del 0,57% experimentado en la última sesión de ayer no le permitió consolidar la cota psicológica de los 9.400 puntos.

En concreto, el principal índice español se situó en los 9.393,7 enteros, muy lejos del máximo histórico de 15.945 puntos que logró alcanzar un día como ayer pero de 2007.

Las mayores caídas las presentaron Inditex (-2,68%), Bankia (-2,26%), Banco Santander (-2,18%), Bankinter (-2,04%), Ence (-1,78%) y ACS (-1,11%), mientras que en lado contrario se colocaron Acerinox (+2,54%), Acciona (+1,99%), Siemens Gamesa (+1,72%), Meliá (+1,14%) y Mediaset (+1,07%)

IAG moderó su caída al cierre hasta el 0,72%, a pesar de liderar los descensos en la apertura al haber recortado el crecimiento del beneficio por acción desde el 12% al 10% por año para el periodo 2020-2022.

El resto de bolsas europeas concluyeron la jornada también con signo negativo: El Ftse 100 de Londres cayó un 0,64%, el Dax de Fráncfort un 0,49% y el Cac 40 de París un 0,23%.

Por otro lado, el precio del barril de petróleo de calidad Brent, retomó los 62 dólares, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) se colocó muy cerca de los 57 dólares.

La cotización del euro frente al dólar bajó ligeramente a 1,1021 billetes verdes, mientras que la prima de riesgo española se mantuvó en torno a los 62 puntos básicos, con el interés exigido al bono a diez años en el 0,388%.

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