Nunca imaginé, a estas alturas, que volviese a encontrar esa relación tan cercana que estoy sintiendo contigo.

No sé si será sana a largo plazo, no sé lo que el futuro nos deparará, tan solo se que lo que estamos viviendo es algo que no se nos olvidará jamás.

Pocos días antes que de comenzase la primavera llegaste a mi vida casi sin esperarlo, llegaste dentro de la sencillez de mis días y te sumaste a mi día a día sin apenas darme cuenta.

Es cierto que al principio, al no estar acostumbrado, me sentía raro, no terminaba de sentirme cómodo cuando salíamos, nunca había experimentado nada igual, incluso llegué a pensar con alegría, que lo nuestro iba a ser pasajero.

Estamos terminando julio y dejando atrás cuatro meses inolvidables, tengo en mi memoria, tantas y tantas cosas que hemos vivido juntos, que quisiera agradecerte lo bien que te has adaptado a mi vida, aunque quizás, yo sea más “rarito” y todavía no termine de adaptarme a ti.

Al principio y pienso que como todos, las primeras semanas fueron algo tímidas, no nos conocíamos de nada y poco a poco y muy de vez en cuando, salíamos algo de casa aunque fuese solo a hacer la compra.

La primavera tomó fuerza en nuestras vidas y seguimos nuestra aventura dando algún que otro paseo por nuestro Puerto ya que el confinamiento daba paso a esa nueva normalidad que nos ofrecían.

Me quedé con la pena de enseñarte mi Semana Santa, mi Feria, aunque conociéndote mejor, creo que no te va a gustar, por lo cual, como nuestra relación está libre de compromisos, el año que viene tampoco te voy a obligar a conocerla.

Hemos salido de copas, hemos salido a tapear, hemos paseado juntos incluso por Sevilla y has hecho algo, que jamás pensé que hicieses, que ha sido, venir con mi familia a la playa.

Cualquier otra persona te agradecería todo esto, pero ya he dicho antes que lo mismo soy un poco “rarito” y no es normal que en cuatro meses, te hayas adaptado tanto a mí, hasta el punto de hasta venir al trabajo.

Pero si te voy a decir, que en cuanto pueda y cuando sea lo menos doloroso para los dos, te dejo para siempre.

P.D.: no podré olvidarte en la vida, señorita mascarilla.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios