Jueves Santo Horarios, itinerarios y recorridos del Jueves Santo y Madrugada en la Semana Santa de Cádiz 2024

Pablo-Manuel Durio

pdurio@diariodecadiz.com

Cádiz vuelve a pensar a lo grande

La activación de la reconstrucción de una barriada entera se une al reciente anuncio del pabellón Portillo o la próxima construcción de hasta cinco promociones de Vivienda

Los años de gobierno de José María González en el Ayuntamiento habían estado marcados –entre otras muchas cuestiones– por una muy sobria política económica que apenas destinaba partidas para inversiones. La sensación es que el capítulo de obras, proyectos y desarrollo de la ciudad se había frenado prácticamente por completo, salvo puntuales intervenciones que se conseguían gracias a financiaciones externas (previa astucia municipal para conseguirlas). El ritmo de los proyectos que lideraba el Ayuntamiento ha sido posiblemente excesivamente lento y falto de ambición, con un gobierno que siempre ha defendido alejarse de los “mamotretos” de la etapa política anterior.

Pero en los últimos meses esta práctica habitual ha cambiado, y el Ayuntamiento ahora vuelve a hablar de grandes proyectos, a liderar actuaciones de calado en la trama urbana de la ciudad, a mostrar su decisión por ejecutar obras importantes que acumulan años de parálisis (más allá de 2015).

Cádiz vuelve así a pensar a lo grande, como evidenciaba este jueves el alcalde y la concejala de Vivienda al presentar la reconstrucción completa de una barriada, la de los patios de La Tacita, derribando todos sus edificios (los más antiguos del parque municipal de viviendas) y levantando nuevos bloques donde serán realojados los vecinos con todas las comodidades y convirtiendo esos característicos patios que tanto se cuidan en esta zona de extramuros en una gran plaza, además de conectar de manera directa la calle García Carrera con la Avenida principal. Una actuación que se contempla a doce años vista -aunque el proyecto contempla otro calendario que alargaría las obras hasta 18 años, en función de la capacidad económica- y que a día de hoy ronda los 33 millones de euros.

Esta gran operación urbanística que recuerda a la que se llevó a cabo en su momento en los Cuarteles de Varela, o se asemeja también a la eterna remodelación del Cerro del Moro que acumula más de 30 años de camino, se une en el tiempo al reciente anuncio del Ayuntamiento de retomar, al fin, el proyecto de construcción del pabellón Fernando Portillo, al que ya han destinado 5,5 millones de euros para iniciar las obras (en este caso, con la construcción del aparcamiento subterráneo para levantar luego el nuevo equipamiento deportivo).

Además, en materia de Vivienda trabaja Procasa en la actualidad en cinco promociones cuya financiación ya está en poder de la empresa municipal, según insistía esta semana la concejala Eva Tubío. Unas obras que están en distintas fases de redacción de proyectos y licitaciones y que darán como resultado alrededor de un centenar de viviendas disponibles para los miles de demandantes registrados en la actualidad. Números bastante elevados si se compara con el bajo ritmo de construcción o rehabilitación de vivienda pública que el Ayuntamiento ha llevado estos últimos años.

A estas tres grandes actuaciones que están siendo noticia estos últimos días hay que sumar otros proyectos que al fin se ponen en marcha o que alcanzan su recta final de ejecución, como la rehabilitación de los depósitos de tabaco (que finalmente será completa porque la reducción del proyecto Edusi se ha visto compensada con otra financiación Next Generation), el equipamiento del Centro de Interpretación del Carnaval (cumpliendo así un objetivo cuyos primeros pasos en firme se remontan a los años 90), la reconstrucción del Teatro Pemán en el Parque Genovés, o la inminente apertura de la Plaza de España como gran apuesta peatonal del equipo de gobierno (avalada ahora por el Partido Popular, que fue muy crítico al principio).

Incluso puede achacarse también a este gobierno de Kichi la próxima construcción del hotel de la tribuna del Estadio, ya vendido a la empresa granadina Luna para reforzar notablemente la planta hotelera de la ciudad junto a la próxima puesta en marcha del hotel de Tiempo Libre. Y su cuota de responsabilidad tiene también en que el proyecto de traer a Valcárcel la Facultad de Educación sea al fin viable para la Junta de Andalucía.

Hasta en la reforma de una fuente el Ayuntamiento mira ahora más allá y proyecta una ambiciosa reforma como la que está realizando en las Puertas de Tierra, en la que Aguas de Cádiz va a invertir cerca de un millón de euros.

Todas estas actuaciones, obras, proyectos o anuncios, en definitiva, invitan al optimismo pues hace creer que Cádiz vuelve a pensar a lo grande, que desde el Ayuntamiento vuelven a plantearse retos de cierta envergadura para seguir mejorando y desarrollándose como ciudad.

En este nuevo rumbo municipal hay quien señala el trabajo económico anterior como responsable, habiendo mejorado notablemente la situación financiera del Ayuntamiento, otorgando así cierto oxígeno para afrontar ahora operaciones que desde la llegada de Kichi en 2015 eran inviables. Y los que no piensan tan bien, solo ven en estos anuncios de las últimas semanas una carrera electoral que ya habría comenzado de cara a las municipales de mayo de 2023. Pero sea por un motivo o por otro, lo cierto es que esos grandes proyectos han sido rescatados, han salido de los cajones donde aguardaban pacientemente y se han vuelto a colocar sobre la mesa. Y solo eso ya es positivo para la ciudad.

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