El abuso del oligopolio eléctrico, las cinco grandes empresas que dominan el mercado, no tiene límites. Les da igual que millones de personas lo estén pasando muy mal con la crisis de la pandemia; a sus directivos sólo les interesan los beneficios, los dividendos y sus bonus y jubilaciones multimillonarias. Y los gobiernos -este, y los anteriores-, demuestran la más absoluta incapacidad para parar este descontrol de precios.

Y lo que habría que preguntarse es por qué tenemos que comprar la electricidad cuando podríamos generar la que necesitamos. Somos deficitarios en petróleo, pero excedentarios en sol.

Yo ya me he decidido. La facilidad de instalación de las placas, se hace en un día, y de financiación, la Junta de Andalucía subvenciona el 40%, se ve dificultada por el absoluto boicot de la empresa distribuidora, esto es, Endesa. Yo hace tiempo que me cambié a una cooperativa suministradora de energías renovables, pero Endesa sigue teniendo el monopolio de la distribución. La red eléctrica es suya.

Una vez instaladas las placas lo notifiqué a Endesa para que comenzara a contabilizar la energía que vertía a la red, y que la descontaran del consumo. Iluso de mí, pensaba que era cosa de días. ¡Un año he tardado en conseguirlo! Prolijo sería contar todas las artimañas que han utilizado para impedir que formalizara el Contrato Técnico de Acceso, para que se contabilizaran los excedentes que vierto a la red cuando no consumo la energía eléctrica que generan las placas.

Cuando por fin conseguí formalizar con Endesa el nuevo contrato, la cooperativa suministradora formalizó el suyo en unos días, con la modalidad de compensación. Y ahí estaba yo esperando ilusionado mi primera factura, para comprobar si eran certeros los cálculos de que producía lo suficiente para no tener que pagar nada. Pero llegó, y no constaba la energía generada por mis placas. Puesto en contacto con la suministradora me informan de que Endesa no les mandaba las lecturas, por lo que hacía una estimación del consumo de los últimos meses. Tras nuevas gestiones, por fin lo conseguí.

Ahora no pago nada de consumo, sólo los gastos fijos, unos 15 euros, que bajarán con la reducción del IVA. El siguiente paso debe ser conseguir que nos paguen los excedentes que producimos.

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