Tal como estaba programado, el pasado lunes 19 tuvo lugar el tercer concierto del ciclo Lunes de clásica en La Norica. En esta ocasión con un dúo de intérpretes jóvenes pero con mucho talento y saber hacer.

Nos trajeron un programa ambicioso, denso y entretenido, que abarcó desde el barroco y clasicismo del siglo XVIII de J. S. Bach y su hijo C.P.E. Bach, hasta el actual siglo XXI. Una obra de Pablo Sarasate, en representación del siglo XIX. Otra de Sergei Prokofiev en representación del siglo XX, hasta la música más actual de Pierre Sancan, fallecido en 2008.

Con una impecable presencia en el escenario, Marta Femenía Martínez a la flauta y Karla Martínez Rabanal comenzaron interpretando la deliciosa Sonata en Sol mayor Wq 86 de Carl Philippe Emanuel Bach, ante un público deseoso de olvidar la cantidad de agua que cayó en Cádiz minutos antes del comienzo del concierto. Dicho sea de paso, me gustaría destacar el interés del público gaditano, que acude los lunes a este ciclo con fidelidad y entusiasmo, pese a las inclemencias del tiempo. Al césar lo que es del césar.

Tras la obra del segundo de los hijos de J.S. Bach, vino la Sonata en Sol menor BWV 1029 del genial alemán, referente por excelencia del barroco musical. Una sonata que fue escrita por J S Bach para viola da gamba y clavicémbalo, pero que fue interpretada por Marta y Karla en una transcripción para flauta y piano, y donde el comienzo lo hace el piano seguido de la flauta. Una curiosidad esta aportación del dúo Femenía Martínez, que además interpretó la pieza con energía y aplomo.

Ya en la segunda parte del concierto, cambiando por completo el estilo, nos deleitaron con una impresionante versión de la Fantasía sobre Carmen Op. 25 de Pablo Sarasate. Ataviadas para la ocasión con mantones, dejaron boquiabierto al público con la transcripción para piano y flauta de D. Formisano de la obra de Sarasate. Excelente.

Cerraron el programa oficial con dos obras del siglo XX: la Sonatine pour flute de Pierre Sancan, una composición de 1946 que nos trajo tiempos mucho más cercanos, y en esta ocasión llenos de frescura. Y la Sonata en Re mayor Op. 94 del ruso Sergei Prokofiev, una obra de cierta complejidad pero que, junto con la pieza de Sarasate, fue lo mejor de la noche. Estupendo.

Al final hubo propina: Veloce, una pieza de jazz de Claude Bolling, un pianista y compositor actual, sobre todo de música de cine (Cannes, 1930), con gran éxito, sobre todo en Estados Unidos.

Marta y Karla, el dúo Femenía Martínez, además de su belleza, elegancia, y juventud, nos trajeron un concierto muy didáctico, demostrando que dominan la música actual, sin olvidar los fundamentos clásicos. El público aplaudió con ganas. (Para quien no pudo ir al concierto, decirle que el próximo jueves 22 actuarán también en Sanlúcar, en el Conservatorio elemental Joaquín Turina, de la mano de Juventudes Musicales).