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Cultura

La incertidumbre planea sobre la Fundación Provincial de Cultura

  • Programas consolidados del organismo público como Diálogos con la Ciencia han desaparecido de la programación de este año y, se teme, la anulación o recorte de otros veteranos como FronteraSur

Poco o nada se sabe del nuevo rumbo de la Fundación Provincial de Cultura (FPC) desde el cambio de gobierno de la Diputación gaditana. La incertidumbre planea sobre los planes de futuro del organismo público, actualmente dependiente del área de Desarrollo Económico de la casa de la plaza de España, y las alarmas saltan en el ámbito de la cultura ya que han desaparecido algunos programas con larga tradición en la Fundación como Diálogos con la Ciencia, que se venía celebrando anualmente en el Palacio Provincial (en este mes de noviembre), y se teme por la supervivencia de otras plataformas veteranas en la política cultural de la FPC como FronteraSur o el propio COCU.

Científicos como Francisco J. Ayala, Miguel Delibes de Castro, César Nombela y José López Barnero, el neurobiólogo Javier de Felipe o el profesor Camilo José Cela Conde han pasado por las sesiones de Diálogos con la Ciencia, que comenzó en 2004 bajo el nombre Del hombre de Atapuerca a la conquista del espacio. Un año inaugural en el que se contó con las presencias del astronauta Pedro Duque y el paleontólogo Juan Luis Arsuaga.

Según fuentes del ámbito cultural provincial, consultadas por este periódico, Diálogos con la Ciencia podría no ser el único ciclo que sea desechado por la nueva dirección de la FPC. Una dirección que también está rodeada de misterio y secretismo ya que, aunque la Fundación sigue teniendo como director a Antonio Rodríguez Cabañas, en los últimos meses han salido nombres a la palestra como posibles sucesores del director que lleva al mando de la FPC desde 2004. José María Campllonch, Vega López y Manuel González Piñero fueron los anteriores regentes de la entidad que se creó en 1991 como resultado de la desaparición de la Fundación Alberti en Cádiz (tras diferencias con la familia, la fundación se trasladó a El Puerto). Así, la entidad que se queda en Cádiz pasó a llamarse Fundación Provincial de Cultura y, aunque en sus primeros años su actividad se centraba primordialmente en la capital, poco a poco, la provincia y, en especial, las localidades de menos de 50.000 habitantes se convitieron en los destinatarios prioritarios de sus actividades.

Efectivamente, la labor en estas poblaciones viene a ser la función principal de la FPC que cuenta con una herramienta esencial para este trabajo, el Plan de Cooperación Cultural (COCU), un instrumento de participación entre la FPC y los Ayuntamientos de la provincia para fomentar, desarrollar y difundir actividades culturales en las localidades de nuestro territorio.

De esta forma, no es extraño que la mayor preocupación de las fuentes entrevistadas sea la continuidad de las actividades que integran el COCU. Un programa con poca repercusión mediática, con dudable renta política pero de inmensa proyección social ya que se encarga de difundir ocho grandes áreas culturales (artes escénicas, cine y audiovisuales, didáctica cultural, difusión del patrimonio, exposiciones itinerantes, fomento de la lectura, música en todos sus estilos y nuevas tendencias culturales) a los municipios más pequeños de la provincia cuyos ayuntamientos no pueden soportar por sí solos una programación cultural. Por otro lado, las actividades son realizadas por empresas y artistas, en su mayoría, de la provincia. Una excelente manera de fortalecer el tejido de las industrias culturales.

¿Si se teme por la pervivencia del COCU? La respuesta es sí, se teme. Sin embargo, cabe recordar que ya está elaborado el catálogo de propuestas para el año 2012 (se puede consultar en la página web). Lo que aún está en el aire es la presentación de este catálogo a las distintas poblaciones.

La inquietud también roza a las becas de FronteraSur, una plataforma que apuesta por los nuevos creadores y que ha amparado los comienzos de artistas como, por ejemplos, los prestigiosos gemelos isleños MP & MP Rosado. Ya, el pasado año, el presupuesto para las becas se vio reducido de 30.000 a 20.000 euros. Ahora, varios creadores y agentes culturales no ven claro que estas becas tengan cabida en el nuevo rumbo de la FPC.

Lo que ya es un hecho es la amputación de uno de los servicios que dependían de la delegación de Cultura, el Servicio de Publicaciones, que los regentes de Diputación han decidido transplantar a la gran área de Presidencia y Coordinación. Un hecho llamativo ya que este servicio contiene la edición de publicaciones culturales como las revistas Caleta (cuyo último número sí se ha presentado en las jornadas dedicadas a Carlos Edmundo de Ory), RevistAtlántica o la colección de poesía y relatos, Alumbre.

Desde la actual delegación de Cultura de Diputación no se tienen noticias de ninguno de estos temas a pesar de que, desde este periódico, se ha insistido en entrevistar a la nueva diputada, Pilar Pintor, desde hace varios meses.

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