El drama de la inmigración reflejado en Harragas, del director argelino Merzak Allouache, ganó la Palmera de Oro de la Mostra de Valencia-Cinema del Mediterrani, cuya trigésima edición concluyó ayer con el homenaje al universo nostálgico del cineasta Giuseppe Tornatore.

El siciliano llegó ayer a Valencia para recibir un homenaje en la gala de clausura, después de que la Mostra le haya dedicado la primera retrospectiva en España a través de un ciclo con todos sus largometrajes y gran parte de sus trabajos para televisión o publicidad. El ganador de un Oscar con Cinema Paradiso agradeció en rueda de prensa el honor que significa la programación dedicada a su filmografía, y lamentó que sólo ha podido venir un día porque está inmerso en la promoción de su última película, Baaria.

Sobre este último trabajo, un repaso con ciertos tintes mágicos por la Italia del siglo XX, Tornatore afirmó que es un largometraje "muy reflexionado y muy deseado durante muchos años".

El español March Recha, con un alegato contra la depredación de la naturaleza (Petit Indi) y la francesa Mona Achache, con su ópera prima (El erizo), compartieron la primera jornada competitiva dentro del Festival de Valladolid junto al veterano Theo Angelopoulos (El polvo del viento).

El realizador barcelonés Recha lanzó con Petit Indi el mensaje de una naturaleza al borde de la completa sumisión al desarrollismo y prácticamente en vías de extinción, su sexta película desde El cielo sube (1991) y que han protagonizado Eduardo Noriega, Sergi López, Pere Subirana y Eulàlia Ramón.