Tres vidas o tres formas de materializar, por temáticas, la audaz destreza del artista gaditano Ricardo Galán Urréjola. La galería Ansorena de Madrid se hace testigo de esta exposición "especial" que hace unos días inauguró en la capital. Especial, explica el propio autor, por ser "la primera vez que expongo Tres vidas, que alude precisamente a tres temáticas diferentes que la componen". Concretamente, ciudad, naturaleza y quietud de las cosas, añade.

Tres patas de una obra, una trayectoria que inició años atrás recorriendo ciudades, en perspectivas minimalistas de grandes o pequeñas urbes, y que ya el pasado año amplió con enigmáticos espacios naturales, en una andadura que completa desde la quietud de las cosas de nuestra cotidianidad. Galán Urréjola explica así la forma en que se fusionan en la vida de un mismo personaje sus tres mundos. "La ciudad, con todos los testimonios de nuestra actividad social, movimiento y vitalidad en un extenso espacio; la ciudad como el gran invento humano, donde nos desarrollamos y exhibimos entre un mobiliario en el que aparecen nuestros grandes edificios, vehículos, señales que entendemos, personajes que deambulan, luces y sombras extensas. Escenas de toda una vida", dice. De la naturaleza destaca sus "vivencias y embeleso, que la mayoría no vivimos a diario, pero que forma parte de nuestros ancestrales fundamentos. El bosque, la maleza y la flora", asevera. Para finalmente introducirse en esa parte más inédita de su producción, aunque muy cercana a su vida diaria. "Es la vida de las cosas, lo que los ingleses llaman acertadamente still life. La vida quieta", o lo que es lo mismo, "la percepción de los objetos cercanos, llenos de brillantez, colocados en nuestra cercanía para hacernos la vida más entrañable", asevera.

En definitiva, comenta en el catálogo expresamente editado, que todas estas vidas, creadas en paralelo, "tienen la misma importancia para mí", con esta visión de sus mundos en uno.

Si bien, deja abierto un futuro artístico colmado de otras fórmulas creativas, "otras vidas en mi mundo que espero mostrar", asevera el artista, que acaba de exhibir su obra en Estrasburgo y en Amsterdam.