"Lo difícil no es tocar la música, sino llegar a la esencia espiritual que la música contiene", afirma el guitarrista Manolo Sanlúcar. Una intención que tratará de poner de manifiesto esta noche sobre las tablas del Teatro Falla, dentro del programa Flamenco viene del Sur, con la obra Baldomero Romero Ressendi. La voz del color.

El trabajo es una forma de saldar la cuenta pendiente de Manolo Sanlúcar con el pintor "recordándolo, sintiéndolo", transmitiendo en música lo que transmiten sus cuadros. En La voz del color, Sanlúcar realiza una recreación del mundo pictórico de Ressendi, un creador formalmente avanzado pero que gustaba del flamenco antiguo. Está Los condenados, una pieza-cuadro que renuncia a la densidad dramática, para expresarse desde un ritmo suave de tangos. O La mirada del tiempo, el retrato de un torero viejo que añora la ilusión de su pasado.

La voz del color fue presentada en la pasada Bienal de Sevilla, donde obtuvo el premio Giraldillo a la mejor música. Preocupado siempre por otorgar a la música flamenca la dignidad que merece. Manolo Sanlúcar ha compuesto obras sinfónicas (Fantasía para guitarra y orquesta, Soleá, Aljibe ) y ha grabado discos que figuran como de culto en el Olimpo de los aficionados - Tauromagia, Medea o Locura de brisa y trino-.

Además de Sanlúcar, el concierto cuenta con la actuación de David Carmona (segunda guitarra); Carmen Grilo y David Pino al cante; Agustín Diassera y Tete Peña a la percusión y Sandra Carrasco, y Macarena de la Torre en los coros y palmas.