Con una excelente encuadernación y de lectura cómoda. Así nos llegan de la mano de Alianza Literaria el ganador y el finalista del IX Premio Unicaja de Novela Fernando Quiñones. Podrían ser dos caras de la misma moneda, y quizás sea así a tenor de los paralelismos entre ambas: dos intrigas urbanas a partir de sendas muertes, dos investigaciones hacia el pasado en el siglo XX, protagonistas que han ascendido la escala social, dos envíos que resultan claves en el enigma.

La suite de Manolete, ganadora del premio, sigue la senda de otros bestsellers. Como sus protagonistas, el cordobés Joaquín Pérez Azaústre nos prepara un cóctel, con una base de misterio y novela negra, que adorna con gotas de cama, y en la que intercala una brillante e intensa guinda: la biografía de Manolete.

El argumento coquetea con la figura de Juana García Noreña, bajo cuyo nombre ganó García Nieto el premio Adonais. Pistas escondidas en ciudades y libros, héroes accidentales aspirados por la trama, oscuras intrigas de alta sociedad, personajes enigmáticos… Todo ello le sonará al lector, acostumbrado ya a estos trucos, que disfrutará con una historia que va a más sin reservar fuegos de artificio para el final y que tiene detalles del quehacer poético de su autor.

En El loco de las muñecas, título de la obra finalista, Empar Fernández construye una intriga coral a partir de las variadas voces de sus protagonistas. El puzzle va indagando en el pasado de un indigente encontrado muerto junto a las muñecas que cuidaba, y que había sido un brillante abogado hasta su desaparición. A través del testimonio de quienes lo conocieron se desvelarán las razones de su locura en un intenso drama familiar que, en ocasiones, adolece de cierta heterogeneidad en la credibilidad de las voces, algún monólogo prescindible, y excesivo melodrama, pero que conforma un interesante retrato social.

Unos títulos que gustarán especialmente a aquellos lectores que disfruten con la literatura de evasión.