El minucioso trabajo que el desaparecido archivero Alberto Sanz Trelles desempeñaba en el Archivo Histórico Provincial -donde trabajó durante 20 años- se tradujo, entre otros logros, en el importante descubrimiento de tres legajos perteneciente al Archivo de Indias. Junto a estos originales olvidados en su momento en el despacho del archivero, una vez ordenado el traslado de la Casa de Contratación de Cádiz a Sevilla, figura toda una relación de catálogos de aquel trasvase de documentos entre ambas capitales tan cruciales en el comercio de Indias. Todos ellos forman ahora parte del libro Catálogos de planos, dibujos y documentos varios, que ayer fue presentado de la mano de su compañero, amigo y director del archivo sito en la Casa de las Cadenas, Manuel Ravina.

De su rigor y meticulosidad habló en el acto que ayer se organizó en Cádiz con motivo del Día Internacional de los Archivos, con el objetivo de presentar tanto el libro de Alberto Sanz (1959-2010), como la exposición Mapas de la provincia de Cádiz -que desde ayer puede verse en el patio del edificio-, y el nuevo díptico de la Casa de las Cadenas, cuya flamante portada se exhibía ayer recién restaurada.

Contó ayer Manuel Ravina en este encuentro que fue presentado por la delegada provincial de Cultura, Yolanda Peinado, que esta obra que él mismo ha editado de la mano de la Consejería de Cultura incluye dos trabajos. "Son planos y dibujos pertenecientes a los fondos de la Delegación de Hacienda y del Gobierno Civil de Cádiz ". En estos fondos que durante mucho tiempo permanecieron guardados en cajas buceó exhaustivamente este querido compañero, asesor técnico de Gestión Documental del Archivo, al que el propio Ravina recuerda en el prólogo "trabajando con la puerta entreabierta, la luz sobre el documento y en silencio".

De aquellos largos ratos se extrajo toda la documentación "olvidada en Cádiz" referente a la entrada y salida de documentos de las oficinas de la Casa de Contratación de Indias de Sevilla a las de Cádiz y viceversa. La partida de Cádiz se produjo en dos remesas, la primera tuvo lugar en 1786 por orden de Gálvez. Eran documentos pertenecientes a Hacienda y junto a los que también extrajo planos de los catastros y de las riquezas rústicas de Cádiz.

También recoge la obra todos los planos del Gobierno Civil pertenecientes al periodo de 1793 a 1868, "con planos de cárceles de la provincia", por citar un ejemplo.

Su labor, como la de otros archiveros del centro ha permitido la exhibición de hasta "cinco exposiciones en lo que va de año", comentó Yolanda Peinado. La última se presentó ayer bajo el título Mapas de la provincia de Cádiz, de la que se ha editado un pequeño catálogo.

En las vitrinas que atesora el patio de la Casa de las Cadenas pueden verse algunos de estos mapas sobre la distribución territorial y administrativa de Cádiz. Son planos que desde 1833 -cuando nace la provincia como unidad política a raíz de la reforma de Javier de Burgos- muestran varios tipos de representaciones gráficas del nuevo territorio, al hilo de la proliferación de organismos en torno al Gobierno Civil.

Entre ellos pueden verse mapas de distribución de las zonas agrícolas y forestales, de las zonas ganaderas, viñedos (todos de 1951), de carreteras (1902), de expediciones escolares, hidrológicos (1899) e incluso uno perteneciente a la sección femenina (1970), sobre actividades de mujeres desempeñadas por el movimiento nacional en la provincia, entre otros muchos.