Entre los meses de junio y principios de julio se ha realizado la cuarta campaña de trabajos de campo (prospecciones y excavaciones) de la Carta Arqueológica del norte de Marruecos, llevada a cabo por un equipo hispano-marroquí. Los trabajos se enmarcan en un proyecto inicial a cinco años entre investigadores de la Universidad de Cádiz (UCA), Universidad Abdelmalek Esaadi (Tánger-Tetuán) y del Institut National des Sciences de l'Archéologie et du Patrimoine (INSAP) de Rabat.

Se han realizado prospecciones pedestres de superficie en la zona de Anjera, Khemis y Oued Marsa. Es un territorio montañoso que permite la comunicación costa interior, en la zona sur del Estrecho de Gibraltar.

Los resultados, según explican los arqueólogos de la UCA que han participado en el proyecto, han sido "muy interesantes", pues se han localizado 35 asentamientos nuevos, todos inéditos, correspondientes a sociedades prehistóricas, protohistóricas, romanas y medievales.

Los directores de los trabajos por parte de la UCA son los profesores Darío Bernal y José Ramos, mientras que por parte marroquí se encuentran los profesores Mehdi Zouak, Baraka Raissouni y Aziz El Khajari.

El proyecto, en el momento actual, ha documentado 203 registros de yacimientos y 61 hallazgos aislados, que se atribuyen a sociedades cazadoras-recolectoras paleolíticas, tribales comunitarias neolíticas, de la prehistoria reciente; de época protohistórica, romana, medieval y moderna.

Se ha realizado un estudio de un abrigo con grabados paleolíticos en el valle de Marsa. Se ha excavado una cueva -El Hafa I- con tres niveles de ocupación, dos de ellos pertenecientes a sociedades prehistóricas vinculables al concepto normativo de Edad del Bronce.

Se han excavado también unas estructuras romanas pertenecientes a una factoría de salazón en el litoral de Marsa.

Este proyecto de análisis del territorio de la región comprendida entre Oued Lau y Oued Liane está permitiendo, desde una perspectiva interdisciplinar y geoarqueológica, analizar patrones de asentamiento, modos de producción y de vida de las diferentes sociedades asentadas en el territorio; así como en las relaciones y contactos con los grupos humanos del sur de la Península Ibérica. Los resultados apuntan a la idea del Estrecho como puente.

El trabajo del grupo se centrará en los próximos meses y en la campaña próxima en la elaboración de la memoria científica de los destacados trabajos de campo realizados. Las autorizaciones y permisos proceden del Ministerio de Cultura del Reino de Marruecos, por parte de la Dirección Regional Tanger-Tetuán.