El Gobierno local de Chipiona atribuye a un impago de la Diputación la “demora y paralización” de las obras de reforma de la céntrica calle Isaac Peral que está motivando las quejas de los comerciantes afectados.

El concejal gobernante Javier Díaz (PP), que ha manifestado el apoyo municipal a dicho malestar, asegura que “el Ayuntamiento ha cumplido con su aportación del 30% del presupuesto, pero la Diputación, gobernada por el PSOE, no paga el 70% que le corresponde”. “Aparte de perjudicar a los comerciantes, el impago se da en una fecha previa a unas elecciones, haciendo además que la empresa tenga que despedir a varios trabajadores”, ha añadido.

Según Díaz, el Gobierno local “continuará reclamando a la Diputación que pague para que puedan concluir las obras”. Se trata de la segunda de las cuatro fases proyectadas, la correspondiente al tramo que une las calles Padre Lerchundi y Larga. Las obras, adjudicadas a la empresa Rhodas, tienen un presupuesto de algo más de 130.000 euros.

La Asociación de Empresarios de Chipiona (Acitur) se queja del “abandono de la Administración a los comerciantes”. “La empresa encargada de estas obras alega no cobrar de la Diputación y está ralentizando al máximo su ejecución. Esta situación está llevando a la ruina a los comercios, que son rehenes de la Administración y de la constructora”, critica.

Por su parte, la Diputación dice estar “a la espera de documentación del Ayuntamiento para poder certificar la primera fase de las obras”. “Se ha solicitado al Consistorio que presente una adenda que contemple la modificación de la obra con respeto a la inicialmente proyectada, un trámite sin el que es imposible proceder a la certificación y el consiguiente pago de la obra para que pueda cobrar la empresa adjudicataria”, ha explicado. La institución provincial ha aseverado que “agilizará el pago tan pronto pueda validar la modificación del proyecto, solicitada hace meses” al Ayuntamiento.