La provincia de Cádiz registró en la jornada electoral del domingo la segunda mayor abstención de las registradas en las 32 elecciones celebradas desde las primeras elecciones generales predemocráticas del año 1977.

El 34,82% de participación contabilizado el domingo en el conjunto de los colegios electorales del territorio gaditano -que situó a Cádiz como la provincia más abstencionista de toda España- sólo tiene un precedente más paupérrimo, que fue, concretamente, en las anteriores elecciones europeas de junio de 2004, cuando acudió a las urnas a ejercer su derecho al voto solamente el 32,73% del censo electoral de entonces.

Ambos porcentajes quedan muy lejanos del interés que suscitaron entre los gaditanos las cuatro elecciones europeas celebradas con anterioridad. Así, las del año 1999 llevaron a las urnas al 58,72% del censo electoral provincial; las de 1994 contó con una participación del 60%; las de cinco años atrás (1989), posibilitó que ejerciera su derecho al voto el 45,76%; y las primeras, las de 1987, atrajo el interés del 58,78% de los gaditanos que tenían en aquel entonces la opción de votar.

Si a las 32 elecciones celebradas desde 1977 se le suman los siete referendums habidos, existe un precedente aún más significativo de escasa participación en las urnas gaditanas. Fue el último referéndum, el de la Reforma del Estatuto de Andalucía celebrado en 1977, el que tiene el dudoso honor de haber registrado la abstención más grande en la provincia de Cádiz, ya que en aquella consulta sólo emitió su sufragio el 30,88% del censo electoral.

En el polo opuesto aparece la primera llamada a las urnas tras la muerte de Franco: en 1976, el referéndum de la Reforma Política provocó en el territorio gaditano una participación masiva que alcanzó al 82,17% del censo electoral, un porcentaje que en la fecha actual parece impensable que se repita.

La comparativa entre los diferentes comicios y referéndums habidos en la provincia demuestra que las elecciones que más interés suscitan entre los gaditanos -al igual que en el resto de Andalucía y de España- siguen siendo las generales, seguidas de las andaluzas.