El Ayuntamiento de La Línea estuvo ayer prácticamente paralizado debido a la asamblea permanente aprobada por los trabajadores municipales en la reunión que a primera hora de la mañana convocaron los sindicatos UGT, CCOO y USO.

Más de 200 trabajadores se congregaban a las ocho de la mañana en el Palacio de Congresos. Hubo reproches a los sindicatos y a la alcaldesa, Gemma Araujo, por el impago de las nóminas. Algunos empleados sugirieron protestar durante la procesión de la Inmaculada Concepción, tal y como se hizo el año pasado cuando el alcalde era Alejandro Sánchez. Otros pidieron a la alcaldesa que se vaya.

Los sindicatos, por su parte, explicaron las gestiones que han realizado ante la Diputación, la Junta y el Gobierno central para que ayuden al Ayuntamiento a solventar la actual situación, ya que insistieron que es en las Administraciones supramunicipales donde está la solución. Y es que a la plantilla municipal de La Línea se le deben ya más de 8 millones de euros. En concreto, les adeudan cinco nóminas a los funcionarios y seis al personal laboral. En breve se acumulará además la paga extraordinaria de Navidad.

Tras más de una hora de reunión se acordó iniciar una asamblea permanente. La plantilla advirtió que mañana "no entrará nadie en el Ayuntamiento, ni la alcaldesa".