Aunque sigue sin concretarse una fecha para la apertura y puesta en servicio del aparcamiento subterráneo de la Plaza Mayor, la delegada municipal de Urbanismo señaló ayer que "no existen obstáculos insalvables" para que así que ocurra y que en las próximas semanas, "una vez se completen los trámites administrativos aún pendientes y se culminen los informes técnicos, podremos ser más concisos sobre este particular".

Cándida Verdier, que está pendiente de mantener en breve una nueva reunión con la empresa adjudicataria de las obras para valorar de forma más detallada el desarrollo y el estado de las mismas, señaló que, "independientemente de que se pudiese plantear en un futuro una actuación de refuerzo en el parking para solventar los posibles problemas que se pudiesen derivar del tránsito en superficie de camiones de alto tonelaje, es evidente que se puede articular un plan coyuntural que permita, con todas las garantías técnicas necesarias, proceder a la apertura del estacionamiento". "Línea", destacó la edil socialista, "en la que estamos trabajando con la empresa adjudicataria y bajo la rigurosa supervisión de los técnicos".

Asimismo, Cándida Verdier señaló que "hasta la pasada semana no se procedió a la petición de la licencia de primera ocupación, trámite previo y obligado para la posterior apertura del estacionamiento".

Por otra parte y a la espera de que el nuevo equipo de gobierno arroje luz sobre la futura apertura de la bolsa de aparcamiento más céntrica de la ciudad, la delegada de Urbanismo adelantó que, "una vez que finalice la Navidad, la adjudicataria procederá a realizar algunos cambios en la Plaza Mayor, ya que ahora lo que más nos importa es que se abra al público y que no provoque más perjuicios a los vecinos y comerciantes de la zona".

Entre las modificaciones que se planean destaca la eliminación del módulo de acceso al aparcamiento, así como de los muros de las rampas, "ya que", apuntó Cándida Verdier, "tienen un impacto visual poco aconsejable en un espacio de esta índole".

"Asimismo", señaló, "queremos que se cambie el adoquinado que se ha habilitado, ya que es bastante incómodo para el tránsito de los peatones".

"En definitiva", concluyó Cándida Verdier, "se trata de una serie de modificaciones tendentes a mejorar el conjunto de la Plaza Mayor y que, en beneficio de todos, ejecutaremos una vez finalicen las fechas de Navidad".

Cabe recordar que la Delegación municipal de Fiestas prevé que la Plaza Mayor se convierta en punto destacado de la Cabalgata de Reyes y que, además, acoja el desarrollo de la Feria del Libro, iniciativas con las que se pretende ayudar al comercio de la zona, muy castigado por el desarrollo de las obras de esta actuación.