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Provincia de Cádiz

La hostelería importa estrategias para relanzar su negocio alrededor de Real

  • La configuración de la nueva ciudad y la merma de ingresos por la crisis han impulsado al sector a aferrarse a nuevos métodos para salir a flote · La Ruta de la Tapa se enmarca dentro de estos instrumentos

"Reconocemos el momento difícil por el que pasamos los hosteleros, por eso hay que hacer el esfuerzo de dar nuevos pasos". Estas palabras las pronuncia un isleño, enamorado de su ciudad y conocedor del sector. Es Pascual Castilla Torrejón, presidente de mandos intermedios de Turismo y Hostelería de la provincia de Cádiz. Hay que buscar estrategias, herramientas, instrumentos que saquen provecho de la nueva configuración de la localidad, un San Fernando que se bascula en torno a una calle Real peatonalizada. Esta metamorfosis, opina Castilla, revoluciona también el concepto mismo de ciudad y afecta, para bien, a todo el sector hostelero y de restauración. "La configuración actual es un escaparate en sí mismo, hay que saber aprovecharlo", apuntaba.

Aunque ese provecho hay que empezar a construirlo desde ya, "y evidentemente no va a tener resultados inmediatos, hay que trabajarlo, poner los cimientos y hacerlo desde ya, con positividad, con ánimo, sabiendo que se está actuando de cara al mañana". Por ello, insiste, la potenciación de estrategias debe convertirse en una obligación y por ello además Castilla ha respaldado una de las primeras que se están aplicando, la Ruta de la Tapa, a la que se han adherido una veintena de establecimientos, ubicados en la calle Real, pero también en sus alrededores, en los que destaca la variedad en los productos y la economía de los precios. "Es una forma de promoción y así hay que verla. En un negocio, es preferible siempre que haya alguien aunque al principio cueste dinero", incidía.

Eso sí, a la hora de ofrecer un producto de este tipo hay que tener en cuenta un plus de calidad, "tenemos que ofrecer creatividad, algo que sea de aquí, claro está, pero con una vuelta de tuerca más", apunta. Por eso considera que la iniciativa planteada este mes para la ciudad -que sin embargo lleva ya doce ediciones en Cádiz- es uno de los pasos necesario. Cebolla rellena de mero, gambas y pimientos del piquillo, berza de judías con calabaza, el bolón de ternera y cerdo, las tortillitas de camarones, las tagarninas esparragás con huevos poche y pan de ajo, entre las saladas; o leche frita, pudin de kiwi y la poleá con coscorrones entre las dulces; son algunas de ellas, repartidas en 16 establecimientos. Y deben sumarse más en años sucesivos, porque ésta debe ser una iniciativa de continuidad, del mismo modo que la Feria de la Tapa, que sirva para que cada establecimiento se dé a conocer a nivel individual y a que San Fernando lo haga en su conjunto más allá del ámbito local.

Uno de los impulsores de esta idea es su responsable, Miguel López, quien reconocía la necesidad de hacerlo en próximas convocatorias. Él fue quien llevó la idea al Ayuntamiento, donde se le dio forma a través de la Delegación de Turismo y salió este resultado. Reconoce además que está trabajando en otras ideas, otras rutas futuras que podrían desarrollarse después del verano porque, a su juicio, San Fernando tiene muchas posibilidades. De momento, apunta, está muy contento con el resultado de la actual y considera que está siendo un impulso para el resto de los restaurantes participantes. Así, explica, diariamente supone una media de 40 tapas incorporadas a la ruta que salen adelante.

Por su parte, en otro restaurante de la ciudad, el Real de Vélez, la entrada del número de tapas diarias es menor, pero también consideran que es una idea que conviene repetir. Son más específicos al explicar el flujo de clientes que entran diariamente solicitando las tapas insertas en la ruta. Así, la encargada del mismo, Esther Helmo, explica que el éxito de la idea se aprecia especialmente en los fines de semana -viernes, sábados y domingos- cuando grupos de personas acuden realizando la ruta, portando el tríptico correspondiente. "Es una forma de llamar la atención, de atraer clientela", reconoce. De eso se trata, aprovechando otros recursos propios de la temporada como el buen tiempo, que sacará a la calle a los isleños, "y esperamos que se animen a consumir", reconoce Castilla.

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