Jueves Santo Horarios, itinerarios y recorridos del Jueves Santo y Madrugada en la Semana Santa de Cádiz 2024

JESÚS NÚÑEZ. historiador

"De 704 guardias civiles, poco más de una docena se opuso a la sublevación del 36"

  • "Un personaje clave tuvo en sus manos cambiar el rumbo de los acontecimientos: el jefe de la Comandancia de Cádiz; tras muchas vacilaciones y presiones, se unió a los sublevados"

El historiador Jesús Núñez (coronel, actual jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Algeciras) se ha doctorado en la UNED, con un sobresaliente cum laude, con la primera tesis sobre la Guerra Civil que tiene como protagonista principal a la Guardia Civil. Es un trabajo de investigación que permite conocer el rol desempeñado por ese cuerpo de seguridad a través del estudio de una de sus principales unidades de ámbito provincial: la Comandancia de Cádiz, compuesta por 704 hombres.

-¿Qué papel tuvo la Guardia Civil en la provincia de Cádiz en la sublevación de 1936?

-Los conspiradores no se fiaban de los mandos de la Guardia Civil y por lo tanto no contaron con ellos para sublevarse. Hasta entonces, la Benemérita había permanecido desde su fundación, en 1844, siempre leal al poder constituido. Iniciada la sublevación, fueron a remolque de los acontecimientos y la mayoría de los puestos se unieron a ella. Fueron un ejemplo más de la llamada lealtad geográfica.

-De los 704, ¿cuántos permanecieron leales a la República y cuántos se unieron a la sublevación?

-La inmensa mayoría de los guardias civiles, a pesar de ser gente de orden y mentalidad conservadora, habitualmente hostilizados desde los sectores más extremistas del Frente Popular, no eran partidarios de una sublevación militar. En buena parte, las primeras horas, e incluso días en algunos casos, se quedaron acuartelados hasta saber que estaba sucediendo realmente. No hubo información inicial y hay que tener en cuenta que entonces había muchos puestos que no tenían siquiera teléfono. Desde el intento de asalto a la casa cuartel de Casas Viejas en 1933 y otros casos similares en España, existía una orden interna confidencial dictada desde Madrid que disponía que cuando se produjeran graves sucesos de orden público, permanecieran defensivamente en los acuartelamientos junto a sus familias hasta que llegaran refuerzos o pudieran ser evacuados hasta otro sitio más seguro. Obedecieron disciplinadamente a sus mandos y les siguieron, en uno u otro sentido. Poco más de una docena se opuso a la sublevación. Ocurrió en Ubrique, bajo las órdenes del alférez Marceliano Ceballos y en Alcalá del Valle, bajo el cabo Manuel Egido. Ambos fueron fusilados. También hubo algunos casos como el del guardia Fernando Núñez, del puesto de Jimena, que era masón y huyó a Gibraltar para pasar después a Málaga. Fue sargento de la Guardia Nacional Republicana y al terminar la guerra estuvo internado con su familia en un campo francés de refugiados.

-¿Hubo guardias civiles represaliados en la provincia?

-Sí los hubo. Mas de medio centenar la sufrieron, por uno u otro bando, y en algunos casos incluso por los dos. Hubo fusilamientos, asesinatos, detenciones, juicios, condenas a prisión, expulsiones, sanciones disciplinarias... El estudio de la represión y depuración interna de la Guardia Civil por ambos bandos en toda España es una asignatura pendiente de la historiografía de la Guerra Civil. Se ha escrito mucho de lo que los guardias civiles hacían en esta faceta pero prácticamente nada sobre la que sufrieron ellos y sus familias.

-¿Qué personaje de la Guardia Civil de la provincia destaca sobre otros?

-Hay un personaje clave porque que estuvo en sus manos la posibilidad de cambiar el rumbo de los acontecimientos: el teniente coronel Vicente González, jefe de la Comandancia de Cádiz y sospechoso de ser próximo a Izquierda Republicana, el partido de Manuel Azaña. Tras muchas vacilaciones y fuertes presiones, se unió finalmente con su Comandancia a la sublevación cuando las tropas del Ejército y la Marina ya estaban en la calles de Cádiz, Jerez, Algeciras y San Fernando.

-¿Qué episodio ha encontrado en su investigación que le ha impresionado?

-Han sido muchísimos episodios que por ser inéditos atrajeron mi interés a lo largo de los doce años que ha durado la investigación, tras haber consultado más de 1.400 expedientes personales. Tal vez el más curioso y desconocido fue el protagonizado por los guardias civiles José Reyes, Tomás Ramírez, Manuel Borrego y Manuel Ligero. Fueron enviados al frente de Aragón con la 7ª compañía expedicionaria de Cádiz y desaparecieron inicialmente en la ofensiva republicana de la batalla del Ebro, en 1938. Sus trágicas vicisitudes darían por sí solas para un libro.

-¿Y el episodio más emotivo?

-Igualmente son numerosos, pues los guardias civiles y sus familias también sufrieron muchísimo. Confieso que en ocasiones se me han humedecido los ojos leyendo los documentos de algunos expedientes. Cuento uno de cada bando. El guardia Juan Gutiérrez salvó la vida a dos campesinos en los Sucesos de Casas Viejas, en 1933, al dejarlos escapar en vez de entregarlos al capitán Rojas, de la Guardia de Asalto. Al inicio de la Guerra Civil, fue asesinado junto a otros compañeros y vecinos de Setenil por una columna frentepopulista procedente de la provincia de Málaga. Margarita Egido, hija del cabo de Alcalá del Valle, fusilado en 1937, cuando ella era un bebé, tardó dos décadas en recibir la parte de la derrama que le correspondía por la muerte de su padre. La tenía retenida hasta cumplir 21 años de edad. En 1957, pidió que se le anticipara para comprar una máquina de coser y ayudar así a su madre, que tenía vetado percibir la pensión de viudedad.

-¿Hay alguna historia con la que le ha molestado toparse?

-Como historiador no hay episodios que puedan molestar pero como ser humano no se es ajeno a los casos de vileza con los que uno se topa a lo largo de la investigación. Aunque fue una excepción, está la deleznable actuación del cabo Juan Vadillo, del puesto de Benamahoma, que terminó expulsado de la Guardia Civil y condenado por sus delitos a más de 17 años de prisión.

-¿Qué participación tuvo la Guardia Civil en la represión de los republicanos en la provincia durante los años de la Guerra Civil?

-Es la ingrata faceta más tratada por los historiadores de la provincia en sus obras. La tesis aporta como novedad un informe estadístico emitido en enero de 1940 por la Comandancia de Cádiz sobre sus principales actuaciones durante la contienda. En materia de represión, como fuerza de seguridad pública, efectuó denuncias, detenciones, registros domiciliarios, conducciones de presos, emisión de informes de conducta y formó piquetes de fusilamiento de condenados a muerte por tribunales militares.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios